Al menos 600 peregrinos egipcios perdieron la vida debido al calor extremo durante la peregrinación anual a La Meca, conocida como el Hach. Las temperaturas alcanzaron los 51.8 °C, creando condiciones insoportables para los millones de fieles que participan en este evento religioso. Un diplomático árabe confirmó que todas las muertes fueron atribuidas al calor.
Esta ola de calor sin precedentes ha provocado un aumento en la mortalidad entre los peregrinos. Las cifras iniciales indicaban 323 muertes, pero el número ha aumentado significativamente. Según informes de prensa y declaraciones de ministerios de Asuntos Exteriores, cientos de peregrinos han fallecido debido a las altas temperaturas. El Hach ha sido históricamente peligroso debido a estampidas, incendios y otros accidentes, pero este año, el calor ha sido el principal factor mortal.
El Hach es una peregrinación anual que todo musulmán debe realizar al menos una vez en su vida si tiene los medios y la salud para hacerlo. Comenzó el viernes y concluirá el miércoles. Este evento atrae a millones de musulmanes de todo el mundo, que se congregan para seguir los ritos enseñados por el profeta Mahoma hace 14 siglos.
Un funcionario de salud saudí, antes de los informes masivos de muertes, comentó que las autoridades no habían registrado muertes inusuales entre los peregrinos, a pesar de las temperaturas extremas. Hasta el momento, el ministerio ha tratado a más de 2 mil 700 peregrinos por enfermedades relacionadas con el calor. Se esperaba que más de 1.8 millones de peregrinos participaran este año, según la Autoridad General de Estadísticas de Arabia Saudita.
Los peregrinos han intentado protegerse del sol con sombrillas, mientras las autoridades sauditas advierten sobre la importancia de mantenerse hidratados y evitar salir durante las horas más calurosas del día, entre las 11:00 y las 15:00 horas.
El Hach siempre ha sido una tarea ardua debido al calor y el hacinamiento, pero las condiciones de este año han sido particularmente difíciles.
Con temperaturas récord y condiciones extremas, este Hach ha demostrado ser uno de los más desafiantes en la historia reciente, subrayando la necesidad de medidas adicionales para proteger a los peregrinos en el futuro.