La Corte Penal Internacional (CPI) ha dado un paso significativo al emitir órdenes de arresto contra el primer ministro de Israel, Benjamin Netanyahu, y el ministro de Defensa, Yoav Gallant. La CPI los acusa de crímenes de guerra, incluyendo la masacre de civiles y el uso del hambre como método de exterminio contra palestinos refugiados en la Franja de Gaza.
El fiscal principal de la CPI, Karim Khan, también solicitó la detención del líder de Hamás, Yahya Sinwar, y otros altos dirigentes de esta organización paramilitar. Los cargos contra los líderes de Hamás incluyen exterminio, asesinato, tortura, violación y toma de rehenes, considerados crímenes de guerra y crímenes contra la humanidad.
La CPI acusa a Israel de “asesinato intencional”, “causar gran sufrimiento” y “usar el hambre como método de guerra” contra civiles en Gaza. Israel, que no es miembro de la CPI, ha rechazado las acusaciones, calificándolas de “vergüenza histórica”.
Karim Khan afirmó que los crímenes de guerra se cometieron en el contexto de un conflicto armado internacional entre Israel y Palestina y un conflicto armado no internacional entre Israel y Hamás. La CPI ha documentado escenas devastadoras de los ataques perpetrados por Hamás el 7 de octubre y su impacto profundo, incluyendo actos de crueldad extrema y calculada.
“Corte Penal Internacional”:
Porque emitió hoy órdenes de arresto contra el primer ministro de Israel, Benjamin Netanyahu, y su Ministro de Defensa, Yoav Gallant, por crímenes contra la humanidad.— ¿Por qué es Tendencia? (@porktendencia) May 20, 2024
Conflicto y jurisdicción de la CPI
La CPI, con sede en La Haya, Países Bajos, es responsable de juzgar a individuos por crímenes de guerra, crímenes contra la humanidad y genocidio. Aunque la CPI tiene una jurisdicción global, Israel no es parte del tratado que establece esta jurisdicción y no reconoce la autoridad del tribunal.
En la última fase del proceso judicial, un panel de jueces de la CPI revisará las solicitudes presentadas por los fiscales. Este panel evaluará la evidencia y determinará si hay motivos suficientes para proceder con las acusaciones y emitir órdenes de arresto.
La acción de la CPI contra líderes israelíes y de Hamás subraya la gravedad de las acusaciones y el compromiso del tribunal de llevar ante la justicia a los responsables de crímenes atroces. La comunidad internacional sigue de cerca estos desarrollos, que podrían tener implicaciones significativas para el conflicto en Gaza y la política internacional.