La Organización de las Naciones Unidas (ONU), a través de su Alto Comisionado para los Derechos Humanos, Volker Turk, ha criticado los desalojos de protestas pro Palestina en campus universitarios de Estados Unidos, calificando algunas de estas acciones policiales como “desproporcionadas”.
Turk enfatizó la importancia de la libertad de expresión y el derecho a la reunión pacífica, especialmente en contextos de profundos desacuerdos sobre asuntos significativos como el conflicto en el Territorio Palestino Ocupado e Israel.
El Alto Comisionado instó a que cualquier medida en respuesta a las protestas se base en la legalidad, necesidad y proporcionalidad, subrayando que la incitación a la violencia o el odio por motivos de identidad o puntos de vista debe ser firmemente rechazada.
Además, Turk solicitó que se examine cualquier conducta de este tipo de manera individual, para evitar la atribución injusta de comentarios inaceptables a todos los miembros de una protesta.
Estas críticas se producen en el contexto de las protestas iniciadas en la Universidad de Columbia en Nueva York y extendidas a otros campus en Estados Unidos y otros países, como en Francia, donde estudiantes han expresado solidaridad con el pueblo palestino ante la ofensiva militar de Israel en Gaza.