A través de los huertos familiares se auto abastece a una familia completa, por lo que se apoya en la producción de hortalizas a través de módulos de 10 X 10 metros, aunque en algunos traspatios también se manejan superficies de 42 metros cuadrados o hasta de 400 m2 y más, se inició en Chiautla e Ixcamilpa de Guerrero, actualmente ya son más municipios, Huaquechula, Tlapanalá, Huehuetlán El Grande y Cuetzalan, entre los más importantes, informó Ariadna de Rosas Enriquez, Coordinadora de la Cadena Productiva Huertos Familiares, en la Fundación Produce Puebla.
El impacto ha sido tan grande, que de una pequeña área cultivada por mujeres para el auto consumo familiar, ahora sus esposos lo implementan en parcelas y hectáreas completas para vender toneladas. En 2008 aplicaron una encuesta a las familias, los resultados fueron que en su dieta diaria, lo que más consumen es:
– 97 kilos de jitomate
– 39 kilos de chiles
– 52 kilos de cebolla
– 124 kilos de frijol
– Una tonelada de tortillas
– Y mil dos piezas de huevo
Además de cumplir el autoconsumo y tener un ahorro de 500 pesos por un ciclo de producción; los huertos familiares obtienen ventas por mil 200 pesos en un semestre. La desventaja es que poco es lo que se puede almacenar, todo se debe consumir de inmediato. La ventaja es que el clima cálido de la entidad, permite dos ciclos por año y entonces las ganancias son de dos mil 400 pesos en promedio.
Por otra parte, con la implementación de tecnología como los abonos orgánicos, la fertilización y el control de plagas, se aumentan los rendimientos. Con el nivel básico de paquetes tecnológicos las productoras aprenden a sembrar, a usar sistemas de riego por goteo o de otro tipo. En un segundo ciclo Fundación Produce les enseña otras tecnologías para aumentar los rendimientos. El primer ciclo es de primavera-verano (junio-julio) y el segundo ciclo es de otoño-invierno (diciembre-enero).
Verduras como el rábano, cilantro, calabacita y ejote, son también de la preferencia en el consumo de las familias del campo poblano. El programa utiliza los recursos amigables con el ambiente, sin pesticidas o insecticidas, se utilizan los bioinsecticidas y uso de extractos vegetales para el control de plagas.
Calidad Orgánica
Asimismo, aunque la obtención del certificado orgánico es caro, si se produce orgánicamente. Las productoras tienen muchas esperanzas que se realice junto con el Ayuntamiento de Puebla el Mercado de la Tierra, donde productores de varias regiones del estado, pueden ofertar su cosecha. En este sentido, Ariadna Rosas comentó que el tener una marca como Mercado de la Tierra, tendrá un sello para vender a un precio diferencial, y así beneficiar a las amas de casa y al consumidor: “Aunque actualmente venden sus productos en las localidades cercanas, al comerciar en la capital del estado, obtendrán un plus por vender productos naturales y orgánicos. Al crearse esas cadenas de producción, podrán distribuir esos excedentes de sus huertos familiares, dijo”.
Al contar con el apoyo del presidente Municipal de Puebla Antonio Gali Fayad, lo único que faltaría sería lograr un encadenamiento productivo para que todo el año o toda la temporada haya esos vegetales. Se sumaría toda la zona periurbana de la Angelópolis, para dignificar a mujeres en comunidades de alta marginación, quienes están en búsqueda de una fuente de ingresos más para sus familias.
En diciembre de 2013 eran ya un poco más de 300 huertos familiares, este año se suman 30 huertos más de una zona rica en flora y fauna, denominada El Tenzo, en el municipio de Huehuetlán El Grande y en la zona de Valsequillo, con un proyecto de áreas naturales protegidas.
La representante de Fupue considera que esta es una gran oportunidad, un apoyo social muy fuerte hacia las mujeres. Al tener una fuente de empleo, ellas se sienten más seguras y con más oportunidades de desarrollarse en la comunidad: “por naturaleza son guías, líderes, tienen esa chispa al tener un proyecto nuevo, se sienten útiles, al percibir que son parte importante en los ingresos familiares, algunas ya son grandes de edad, aun así les interesa aprender nuevas técnicas”, expuso.
Integración Familiar
El proyecto a partir de su éxito laboral y económico, ha despertado el interés de los hijos de las productoras, incluso de los esposos, que han cambiado a sus parcelas grades el sistema de riego por goteo por ejemplo. El recurso del agua es cada vez menor, por lo cual el riego rodado, guiar el surco e inundar las parcelas ya es obsoleto, en cambio con el riego por goteo, el ahorro es de 40 por ciento.
Otro ejemplo claro son los abonos orgánicos, hechos con lombricomposta, extractos húmicos, el líquido resultante, los productores hombres lo compraban entre 800 y mil quinientos pesos el galón de 20 litros. Ahora gracias al módulo que pusieron sus señoras, usan el producto para fertilizar sus parcelas sin gastar tanto.
Al inicio del proyecto no tuvo mucho impacto, porque los campesinos lo familiarizaban con la FAO y sus huertos de traspatio (Naciones Unidas para la Agricultura y la Alimentación, por sus siglas en inglés). En cambio con los huertos familiares de Fundación Produce, las técnicas pasaron al cultivo de maíz, frijol, sorgo y otros productos para venta grande.
