La Secretaría de Administración en Puebla adjudicó bienes y servicios por un monto de 11 mil 623 millones de pesos, así como 723 obras públicas, en 2022, informó el titular de la dependencia, Jesús Ramírez Díaz.
En su comparecencia ante la Comisión de Hacienda y Patrimonio Municipal del Congreso del estado, explicó que de las 723 obras, 698 fueron por licitación pública, es decir, el 97 por ciento.
Se registraron 14 inconformidades, de las cuales solo cinco se encuentran en proceso de desahogo por parte de la Secretaría de la Función Pública (SFP), lo que representa menos del 1% del total de procedimientos.
El secretario explicó que de los bienes y servicios adjudicados por un monto de 11 mil 623 millones de pesos, 9 mil 950 millones fueron por licitación pública, lo que representó el 86% del total.
Dichos bienes y servicios fueron orientados al sector salud, mantenimiento hospitalario, adquisición de material de curación, medicamentos de alta especialidad, servicio de laboratorios clínicos y el arranque del servicio de hemodiálisis en seis unidades médicas para pacientes sin seguridad social.
Invierten 5 mil 063 millones de pesos en obra pública
Asimismo, dio a conocer que el año pasado se invirtieron 5 mil 063 millones de pesos en obra pública y que del total de procedimientos de adquisiciones, los participantes de la licitación no interpusieron inconformidades.
En el rubro de seguridad, Ramírez Díaz detalló que se adquirió equipo para la renovación y modernización de la infraestructura tecnológica del Complejo Metropolitano de Seguridad Pública C5, el arrendamiento de patrullas para municipios, adquisición de insumos, víveres, productos alimenticios para personas privadas de la libertad, uniformes y equipamiento. Mientras que en educación, se contrataron seguros para el personal educativo, la adquisición de uniformes y calzado escolar.
El Gobierno también adquirió despensas, a través de programas alimentarios para mujeres embarazadas, niñas y niños menores de 2 años, personas con discapacidad, adultos mayores, personas en situación de emergencia o desastre, así como apoyos alimentarios a infantes y adultos que padecen cáncer y la adquisición de desayunos escolares, calientes y fríos.