La afectación ecológica que generará el proyecto minero aprobado en Tlatlauquitepec serán mínimas, debido a que los seis barrenos se harán en una superficie de 180 metros cuadrados y no habrá remoción de flora significativa, apuntó la delegada de la Semarnat, en Puebla, Daniela Migoya Mastretta; esto a pesar de que existe oposición de los pueblos indígenas a que inicie la explotación minera en la zona e, incluso, el Congreso local pidió a la dependencia que no avale el proyecto.
En una entrevista, la funcionaria federal, apuntó que la empresa, Minera Autlán, ingresó el Informe Preventivo el 3 de junio de 2013 y se aprobó el 17 de julio de este mismo año, para la realización de seis barrenos para la exploración en busca de minerales en un área “pequeña”, de 180 metros cuadrados, unos 36 metros cuadrados por cada barreno.
“No produce impacto significativo, en lo que se autoriza no hay remoción de vegetación importante, lo que a veces les da miedo a los pobladores es que con los barrenos se puedan afectar los mantos freáticos, pero la empresa a la hora de ejecutar las actividades está obligada a verificar que esa perforación no dañe nada, eso es parte del estudio que hace”, sostuvo Migoya Mastretta.
En el Informe Preventivo se especificarían las actividades que la empresa va a hacer, pero no es un estudio tan minucioso como una Manifestación de Impacto Ambiental (MIA), porque las etapas de exploraciones “no generan” esta clase de análisis.
“La valoración (para hacer el Informe Preventivo) fue procedente por lo reducido, es decir, no estaría generando prácticamente ningún impacto significativo”, dijo la delegada de la Secretaría de Medio Ambiente y Recursos Naturales (Semarnat), por lo cual la Minera Autlán tiene 12 meses para hacer la barrenación.
La Semarnat dio la autorización para la exploración minera, debido a que cumplió con todos los requisitos que se le pidieron, lo que no había hecho cuando presentó el proyecto en ocasiones anteriores, pues a principios de año la misma institución rechazó un plan similar en Tlatlauquitepec.
En caso de que la compañía encuentre minerales en cantidades suficientes para hacer una explotación minera, entonces, sí tiene que entregar una MIA para evaluar si es viable desde el punto de vista ambiental.
Sin embargo, los pobladores de la zona se han opuesto de manera contundente a la exploración minera, debido a que tienen miedo de que se contaminen los mantos freáticos por el uso de cianuro.