El último tratamiento para luchar contra las migrañas es mantener relaciones sexuales. Así lo afirman un grupo de neurólogos de la Universidad alemana de Münster en un estudio que se ha publicado hoy.
¿Solo o acompañado? Los expertos lo tienen claro: lo importante es la actividad sexual sin importar que el “tratamiento” sea con una pareja o de forma individual.
El estudio publicado en la revista especializada “Cephalalgia” asegura que la mayoría de los pacientes que padecen migrañas, y que fueron encuestados por los expertos, desisten de tener sexo. Sin embargo, quien mantiene relaciones sexuales experimenta con frecuencia un alivio en cuanto a su dolor de cabeza.
En concreto, un 60 por ciento de los pacientes con migrañas activos sexualmente mostraron mejorías en su padecimiento. Sin embargo, un 33 por ciento afirmaron tener un dolor de cabeza mayor después de haber practicado el sexo.
En el caso de pacientes con ataques de dolor de cabeza extremos (cefalea en racimos) sólo un 37 por ciento notó mejorías después del sexo, mientras que la mitad aseguró que el dolor empeoró.
Según el estudio, elaborado con más de 350 pacientes que padecen migraña, los grandes beneficiarios de esta terapia son los hombres, que notan con frecuencia un mayor alivio en comparación con las pacientes mujeres.
El último tratamiento para luchar contra las migrañas es mantener relaciones sexuales. Así lo afirman un grupo de neurólogos de la Universidad alemana de Münster en un estudio que se ha publicado hoy.
¿Solo o acompañado? Los expertos lo tienen claro: lo importante es la actividad sexual sin importar que el “tratamiento” sea con una pareja o de forma individual.
El estudio publicado en la revista especializada “Cephalalgia” asegura que la mayoría de los pacientes que padecen migrañas, y que fueron encuestados por los expertos, desisten de tener sexo. Sin embargo, quien mantiene relaciones sexuales experimenta con frecuencia un alivio en cuanto a su dolor de cabeza.
En concreto, un 60 por ciento de los pacientes con migrañas activos sexualmente mostraron mejorías en su padecimiento. Sin embargo, un 33 por ciento afirmaron tener un dolor de cabeza mayor después de haber practicado el sexo.
En el caso de pacientes con ataques de dolor de cabeza extremos (cefalea en racimos) sólo un 37 por ciento notó mejorías después del sexo, mientras que la mitad aseguró que el dolor empeoró.
Según el estudio, elaborado con más de 350 pacientes que padecen migraña, los grandes beneficiarios de esta terapia son los hombres, que notan con frecuencia un mayor alivio en comparación con las pacientes mujeres.
