La reveladora declaración del presidente de OHL Concesiones, Juan Villar-Mir Fuentes, sobre el pacto entre la empresa y el Gobierno del Estado de Puebla para dirimir diferencias por el juicio de la cancelación de la concesión del Libramiento Norte despertó nuevas dudas sobre la forma de adjudicar las obras.
¿Qué es exactamente lo que ocurrió entre la empresa española y el Gobierno de Puebla?
Hasta donde se sabía las autoridades poblanas habían logrado una victoria legal sobre los españoles al cancelar el Libramiento Norte.
Pero ayer la historia dio un giro interesante.
Resulta que no hubo tal victoria legal.
Según Juan Villar-Mir Fuentes existió un arreglo extrajudicial.
El portal de noticias Europa Press publicó la siguiente información: “OHL ha logrado un acuerdo con el Gobierno del Estado mexicano de Puebla con el que cierra el contencioso que mantenían desde mediados de 2012 sobre el contrato de una autopista, la de Libramiento Norte de Puebla, que el grupo se adjudicó en 2008.
En virtud del acuerdo, OHL construirá, en alianza con una empresa local, una autopista de peaje elevada sobre la carretera principal de Puebla, según explicó el presidente de OHL Concesiones Juan Villar-Mir de Fuentes.
‘No obstante, como el proyecto es resultado de un proceso judicial emprendido hace un año, el acuerdo debe aún ser ratificado’, detalló.
De esta forma, el grupo controlado y presidido por Juan Miguel Villar Mir pone fin al contencioso que se abrió con este Estado mexicano en mayo de 2012, cuando le revocó el contrato de concesión de la autopista de Libramiento Norte de Puebla que adjudicó en 2008”.
Hasta aquí la larga pero necesaria cita.
Entonces ya existe un acuerdo cuando la licitación ni siquiera ha sido publicada.
Las dudas surgen sobre la legalidad del pacto.
¿Una obra a cambio de la otra?
Qué opinarán los funcionarios federales que prácticamente han sido excluidos del acuerdo.
¿O es que el propio Enrique Peña Nieto sabe del acuerdo?
Aún se desconocen los efectos que tendrá la reveladora declaración del directivo de la empresa española, pero sin duda serán muchos.
Y es que si ya existe un acuerdo entre OHL y el Gobierno de Puebla, entonces qué sentido tiene la participación del Gobierno Federal y la propia licitación.
Habrá que esperar la postura del Gobierno de Puebla sobre el acuerdo con OHL.
Y también debemos estar pendientes de lo que diga el propio Gobierno Federal.
Y si los funcionarios locales y federales optan por el silencio, cuando se lance la convocatoria y se conozca al ganador de la licitación sabremos con toda certeza si existió o no el pacto OHL – Gobierno de Puebla.
Sin duda será una prueba de fuego para la legalidad en nuestro país.
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@gomezcarlos79
