Pese al incremento de casos de covid-19 en Arizona, el presidente de Estados Unidos, Donald Trump visitó Yuma en un intento de atraer la atención al muro fronterizo que construye en refugios silvestres con graves impactos a los recursos naturales y a costa de miles de millones de dólares del erario, denunció la organización Sierra Club.
“La visita de Trump muestra su total desprecio por la salud y seguridad de los estadounidenses, a días de ordenar que se redujeran el número de test del coronavirus. Las prioridades de Trump son vergonzosas”, aseguró Dan Millis, líder del Programa de Terrenos Fronterizos de la agrupación que cuenta con cerca de cuatro millones de miembros y seguidores en todo EU.
Destacó que los casos de covid-19 en Yuma se cuadruplicaron desde principios de junio, y los trabajadores que construyen el muro se están enfermando, a pesar de que los residentes urgieron al gobierno que detuviera la obra.
“Organizar un mitin bajo techo durante una crisis de salud pública global, poner en peligro la salud y bienestar de los trabajadores de la frontera construyendo su muro —incluso después de que varios de ellos dieron positivo al covid-19—, muestran que el desprecio por la vida de Trump es atroz.
“La construcción del muro y la continua militarización de la frontera tienen que acabar. Tenemos que fomentar políticas que revitalicen a nuestras comunidades y protejan los derechos humanos y nuestras adoradas tierras fronterizas”, indicó Vicki Gaubeca, directora de la Coalición de Comunidades Fronterizas del Sur.
