Al reconocer que el horario de verano ha funcionado para el ahorro energético y reducir el impacto ecológico, el ambientalista de la Universidad Popular Autónoma del Estado de Puebla (UPAEP), Raciel Flores Quijano, sentenció que la medida no se debe suspender, ya que ha generado el ahorro del 1 por ciento en el consumo total, en un año, de todo el país.
Sobre la pertinencia de la medida del horario de verano, el especialista, argumentó que en siete meses se ahorraron, en promedio, 1,300 millones de kilowatts por hora en 7 meses, con los que dos millones de toneladas de bióxido carbono que se dejaron de emitir, al reducir el consumo de combustibles fósiles, además que el ahorro es equivalente al 1% en el país, equivalente, a su vez, al gasto anual del estado de Colima.
“Regresamos al horario de invierno, termina el horario de verano; la medida ha sido positiva, incluso, a nivel industrial, donde los consumos fueron mucho más grandes y representan un ahorro mayor; cuando menos”, comentó.
Finalmente, destacó que este ahorro es difícil que se sienta en la economía de las familias, ya que el consumo en el hogar es mucho menor, además de contar con subsidio federal; también, resaltó que muchas veces es difícil que los jefes de familia lo noten, ya sea por el cambio o la compra de electrodomésticos nuevos o por el aumento o decremento del número de integrantes de la familia, factores que inciden en el consumo eléctrico.
