Según la respuesta oficial, las deudas crediticias del organismo empezaron el 29 de marzo de 1996, cuando signó dos conjuntos de contratos con Banobras. A la fecha, debe dos mil 128.9 millones de pesos.
El director general del Soapap, Manuel Urquiza Estrada, retiró el sello de confidencialidad a la información relacionada con los créditos contratados por la paraestatal, la cual tiene una deuda acumulada de dos mil 128.9 millones de pesos.
El pasado 15 de febrero, el funcionario firmó un acuerdo de reserva sobre la aplicación que tuvo el dinero, bajo el argumento de que “algunos (…) están relacionados con procedimientos administrativos y judiciales que no han sido resueltos y que de revelarse se causaría perjuicio y daño irreparable a las funciones administrativas y judiciales”.
Lo anterior fue expuesto por la Unidad Administrativa de Acceso a la Información del Soapap en la respuesta a la solicitud de información con folio 00038012, que fue hecha por el reportero el día 2 de febrero de 2012.
Sin embargo, el pasado 11 de octubre, Urquiza Estrada respondió el requerimiento de información con folio 000313812, para aclarar que esta historia financiera tiene tres reestructuraciones con el Banco Nacional de Obras y Servicios (Banobras) y el Banco del Bajío, que en algún momento estuvo calculada en Unidades de Inversión (Udi’s) y que la única cuenta vigente será liquidada en 2028.
Según la contestación oficial, las deudas crediticias del organismo empezaron el 29 de marzo de 1996, durante el sexenio del entonces gobernador Manuel Bartlett Díaz, cuando signó dos conjuntos de contratos con el Banobras: 28 documentos por un monto total de 27 millones de pesos y otros 13 por 7.1 millones de pesos, los cuales fueron calculados en 18.5 millones y 4.9 millones de Unidades de Inversión (UDI’s).
Estos grupos fueron finiquitados el 23 de diciembre de 1997, cuando vino la reestructura de ambas líneas que quedaron a un plazo de 180 meses y una tasa de interés de 7.50 por ciento, 2.5 puntos menos que el plan anterior.
Cabe destacar que un año antes, el 11 de diciembre de 1996, el Soapap adquirió un crédito nuevo por 567.8 millones de pesos con Banobras para ejecutar el proyecto integral de agua potable, alcantarillado y saneamiento de la zona metropolitana de Puebla.
Además, la paraestatal también hizo el mismo trámite con la institución de desarrollo para “cubrir el importe del IVA correspondiente al presupuesto de obra e imprevistos y comisión de apertura y disposición del crédito A en tres etapas”, explica la documentación oficial, lo que se traduce en cubrir de entrada el gravamen del crédito anterior para usar el importe total.
En la gestión de Melquiades Morales Flores, específicamente el 31 de diciembre de 2003, por primera vez en su historia, adquirió dos créditos por 739.1 y 100 millones de pesos con una institución privada: Banco del Bajío, con el fin de liquidar su deuda con Banobras y tener recursos para ejecutar obras.
Menos de siete meses después, la cuenta del Soapap creció en 782.7 millones de pesos, a un plazo de 180 meses y una Tasa de Interés Interbancario de Equilibrio más 0.90 puntos porcentuales.
El historial financiero del Soapap tuvo su último movimiento el 30 de julio de 2008, en la administración de Mario Marín Torres, cuando registró la tercera y última reestructuración de la deuda, de nuevo con Banobras, la cual debe liquidarse en 204 meses (30 de julio de 2028), bajo una tasa de intereses de TIEE más 0.49 puntos porcentuales.
Cabe destacar que las dos últimas reestructuras crediticias consistieron en que los bancos liquidan la deuda del organismo, el cual acepta por encontrar mejores condiciones en las tasas de interés y también porque obtienen nuevos empréstitos para realizar sus proyectos de obra. Haz click aquí para ver el documento completo.
