La Fiscalía General de la República (FGR) informó que el asesinato de Ernesto Cuitláhuac Vázquez Reyna, delegado de la FGR en Tamaulipas, podría estar relacionado con recientes decomisos de huachicol en el estado. El funcionario fue emboscado por un grupo armado mientras circulaba por Reynosa en una camioneta Cadillac Escalade, la cual fue atacada con granadas y disparos.
Según la FGR, el ataque ocurrió en el bulevar Miguel Hidalgo, cuando un comando interceptó al delegado y lanzó una granada que lo obligó a salir del vehículo. En ese momento, una camioneta Ford Explorer blanca se le aproximó y sus ocupantes abrieron fuego sin descender. El vehículo oficial fue posteriormente incendiado.
El ataque, que ocurrió entre las 18:15 y las 18:30 horas, se da tras un operativo de la Sedena y la FGR, donde se decomisaron más de 1.8 millones de litros de gasolina robada, además de tractocamiones, tanques, motobombas y maquinaria industrial utilizada por bandas dedicadas al robo de combustible.
La FGR no descarta otras líneas de investigación, pero considera sólida la hipótesis de que el asesinato fue una represalia del crimen organizado.
El gobernador de Tamaulipas, Américo Villarreal, condenó el crimen y reiteró su respaldo a la familia del funcionario, al tiempo que se intensificaron los operativos de seguridad en Reynosa con apoyo de la Guardia Nacional, Ejército y Policía Estatal.
A las 22:00 horas, autoridades localizaron en la colonia Lomas del Real de Jarachina una camioneta Ford Explorer presuntamente utilizada por los agresores para huir, lo que podría ser una pista clave en la investigación.
El caso ha sido asumido por el Gabinete de Seguridad, que ya mantiene contacto directo con los familiares de la víctima y continúa las indagatorias para esclarecer este crimen.