Tras permanecer prófugo desde el brutal asesinato de su pareja en la colonia Vista Hermosa de Izúcar de Matamoros, Próspero N. (identificado inicialmente como José Guadalupe N.) fue detenido por agentes ministeriales como probable responsable del feminicidio ocurrido el 14 de abril de 2025, en ese municipio poblano.
De acuerdo con la Fiscalía General del Estado de Puebla (FGE), el crimen se cometió en el interior del domicilio que la pareja compartía con sus tres hijos menores. Presuntamente, tras una fuerte discusión, el hombre amenazó a la víctima con un machete y posteriormente la golpeó con un objeto de madera, causándole lesiones fatales.
En un primer momento, autoridades locales recibieron el reporte de un fallecimiento por causas naturales. Sin embargo, al llegar al domicilio ubicado sobre la calle Juan de la Barrera, el hallazgo del cuerpo cubierto por una sábana y con múltiples signos de violencia despertó sospechas. La víctima, una mujer de aproximadamente 30 años, fue encontrada sin vida, sentada en una silla, y su cuerpo presentaba claros indicios de agresión física.
El crimen fue descubierto por el propietario de la vivienda, quien acudió a cobrar la renta y, al no recibir respuesta, decidió ingresar. Al observar la escena, notificó de inmediato a los servicios de emergencia.
Los testimonios recabados por los peritos indicaron que el presunto agresor huyó del lugar junto con los tres hijos de la víctima, de 12, 11 y 8 años. La familia había llegado recientemente a Izúcar de Matamoros, proveniente de Amayuca, Morelos.
Gracias a los elementos de prueba recabados en la investigación, la FGE solicitó y obtuvo una orden de aprehensión contra Próspero N., quien fue detenido en la misma región y puesto a disposición de un juez de Control.
“La Fiscalía General del Estado logró identificar y capturar mediante orden de aprehensión a Próspero N., como probable responsable del ilícito”, informó la dependencia en un comunicado.
El presunto feminicida ya fue trasladado ante la autoridad judicial competente, donde deberá responder por los hechos que se le imputan. Mientras tanto, se continúa con el proceso legal y el seguimiento al paradero y estado de los tres menores que quedaron huérfanos tras el crimen.