Después de cuatro años inicia el juicio para determinar si María Dolores y Rosita Marimar, son responsables del homicidio calificado en prejuicio de Tomás N., quien, aparentemente, las explotaba sexualmente, en Santa Matías Tlalancaleca, Puebla.
Las dos mujeres se encuentran en prisión preventiva en lo que esperan que juez les dicte sentencia; sin embargo, luego de casi cinco lustros, María Dolores y Rosita Marimar tendrán su primera audiencia, en la que su defensa alegará que el asesinato se realizó en defensa propia.
En entrevista afuera de Casa de Justicia, la abogada de las acusadas, Karla Micheel Salas Ramírez, informó que la Fiscalía General del Estado (FGE) busca que ambas mujeres pasen 50 años en prisión, tanto ella como las acusadas consideran que dicha sentencia sería por lo menos injusta.
La abogada precisó que este día solo se analizará la jornada procesal, es decir, las fechas en las que se realizarán los juicios o audiencias; además, señaló espera que el proceso tenga perspectiva de género.
Agregó que, a pesar del tiempo de espera, Dolores está muy contenta de que por fin haya comenzado su juicio, ya que este ha sido un proceso muy complicado, el cual se remonta a antes de la pandemia.
A su vez, dijo que continuará impulsando el caso en Change.org, bajo el nombre de “Dolores merece libertad”, con el cual busque que las dos mujeres salgan libres. Detalló que han recolectado 20 mil firmas de apoyo, por lo que, a su parecer, un sector de la población está favor de que las mujeres no sean acusadas de homicidio.
Agregó que no han buscado tener una reunión con el gobernador de Puebla, Sergio Salomón Céspedes Peregrina, ni con el fiscal Gilberto Higuera Bernal, para que les ayude en el caso, por el contrario, quieren agotar todas las opciones legales para que las mujeres sean declaradas inocentes.
Las acusadas, María Dolores, originaria de Veracruz, y Rosita Marimar, de Honduras, fueron engañadas para que se trasladaran a al municipio de San Matías Tlalancaleca, lugar en el que fueron violentadas física y sexualmente por Tomás N.
De acuerdo con las primeras investigaciones, en 2019,Tomás N. asfixió a Rosita Marimar porque se rechazó hacer un trabajo sexual para otro hombre; sin embargo, al momento de ser agredida, Dolores defendió a su amiga y apuñaló a Tomás N.
Después de la muerte de su agresor, ambas huyeron de la escena del crimen; sin embargo, fueron encarceladas y arrestadas por policías, quienes escucharon su testimonio y las revictimizaron.