El magistrado con licencia y ahora titular de la Fiscalía Especializada en Investigación de Delitos de Alta Incidencia (FEIDAI), Fredy Erazo Juárez, es, sin ninguna duda y muchas veces con hechos demostrables, un soldado del gobernador Alejandro Armenta Mier.
Su llegada a la Fiscalía General del Estado debe leerse como una proyección de ejercicio de mando dual, pues se convierte en un refuerzo indispensable y de emergencia para ayudar a la titular de la FGE, Idamis Pastor Betancourt, a salir de la crisis en la que se encuentra y para estabilizar la institución, que vive horas tan bajas como críticas.
Solo si la fiscal vuelve a demostrar que la dependencia y los retos de la dependencia la rebasan, entonces del mando dual se pasará al mando único en beneficio del recién llegado.
A Fredy Erazo, en el pasado reciente, le ha tocado demostrar de qué está hecho en relación con la lealtad al armentismo.
El jurista ha acompañado el proyecto del hoy gobernador desde hace muchos años y ha sacado adelante encargos complicados, en principio, jurídico-electorales, para él y para todo el equipo.
En la campaña de 2018 su mano se dejó ver para sortear muchos obstáculos que, desde dentro del Movimiento Regeneración Nacional (Morena) y desde la oposición, le pusieron a Armenta para intentar frenarlo a la mala.
En 2019, también fue pieza clave en la disputa que el hoy gobernador tuvo con el finado Miguel Barbosa Huerta, por la candidatura a la elección extraordinaria.
Los recursos que el especialista en derecho electoral y otras áreas interpuso, fueron claves para orillar a Barbosa y a su equipo a buscar el acuerdo político.
Hay quienes sostienen que, de no haberse dado el pacto que se selló bajo el auspicio de Ricardo Monreal Ávila, para que Alejandro Armenta se bajara de esa contienda, la historia de esa postulación hubiera sido distinta.
De ese nivel fue la labor jurídica de Erazo Juárez.
Luego acompañó a Armenta también en el Senado de la República, como coordinador para el Desarrollo Democrático y Procesos Electorales de la Mesa Directiva.
Erazo sintió en carne propia el rencor barbosista cuando fue bajado de la magistratura electoral del Tribunal Electoral del Estado de Puebla (TEEP), que ya le había otorgado el Senado.
La venganza de Barbosa por haber operado jurídicamente en su contra en 2019 se expresó con el recurso que llevó a determinar al Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación (TEPJF) que ese lugar debía ser para una mujer.
Y esa mujer fue Idamis Pastor Betancourt, que llegó al TEEP –que presidió– y de ahí, ya con Armenta como gobernador, a la FGE.
Lo pudo haber dejado pasar Miguel Barbosa, pero tenía que dar un manotazo y atajar la llegada del soldado armentista a esa posición.
El poder es así.
Así debe ejercerse.
Fredy Erazo debió disciplinarse y, a partir de entonces, caminar con paso firme, pero también con perfil mesurado.
Una vez que el armentismo triunfó en las urnas en 2024, Erazo mantuvo también mesura.
En diciembre de 2024 fue elegido por el Congreso del estado como magistrado de la Primera Sala Penal del Tribunal Superior de Justicia (TSJ). Obviamente impulsado por el gobernador.
Por muchos meses se dijo incluso que llegaría como titular del Consejo de la Judicatura, pero eso solo quedó en especulación. Hoy esa posición de poder la ocupa otro soldado armentista: Pedro Antonio Martínez Hernández.
La semana pasada, el pleno del Congreso local aprobó a Fredy Erazo su solicitud de licencia a la magistratura, para estar en condiciones de llegar a la FGE en papel de bombero o apagafuegos.
En la institución encargada de la procuración de justicia evidentemente será una especie de cuña para Idamis Pastor.
Ejercerá una suerte de mando dual.
Será los ojos y los oídos de Armenta.
Son las consecuencias de haber permitido que una serie de rufianes, La Banda del Edomex, se apoderara de la institución, pero no para servir a los poblanos, sino para extorsionarlos y amenazarlos.
Si Fredy Erazo será con el tiempo el fiscal general del estado, en lugar de Idamis, dependerá de las circunstancias y de los imponderables.
Llega con toda la confianza del gobernador y solo a él responderá y deberá dar resultados.
Fredy Erazo es un soldado de Armenta.
Armenta le tiene una confianza absoluta y solo de Fredy Erazo 0a quien algunos le reprochan una actitud protagónica– dependerá no fallarle.
El pasado 16 de septiembre, el hoy fiscal especializado en Investigación de Delitos de Alta Incidencia acudió como invitado al desfile cívico-militar por el 215 aniversario de la Independencia de México.
Ahí pudo saludar al mandatario; de hecho, presumió la correspondiente fotografía en sus redes sociales.
Nadie podía saberlo y menos adivinarlo, pero fue la pinche señal.
Fredy Erazo llega como refuerzo, un refuerzo de emergencia. Pero todo, todo puede pasar…





