De las muchas aristas que tiene el conflicto del agua en San Miguel Xoxtla, una que tendría que atenderse de inmediato –con la intervención de la Secretaría de Gobernación del estado– es el pleito de la presidenta municipal en funciones, Guadalupe Ortiz Pérez, con su antecesora, Guadalupe Siyancan Peregrina Díaz, quien actualmente se desempeña como secretaria general del Comité Ejecutivo Estatal de Morena.
Y es que Siyancan Peregrina viene alentando las protestas de vecinos y activistas como Juan Carlos Flores Solís para vengarse y desquitarse de la que fuera su regidora en la gestión municipal 2021-2024, y quien impidió su reelección como presidenta municipal por un segundo periodo al ganarle los comicios.
La actual presidenta, Guadalupe Ortiz, fue candidata del PVEM y en su informe de sus 100 primeros días acusó a su predecesora de haberle dejado un municipio administrativa y financieramente quebrado, endeudado y con pendientes en materia de servicios, seguridad y obra pública, por más de 15.4 millones de pesos.
Hace unos días la Auditoría Superior del Estado (ASE) presentó su informe sobre las revisiones del ejercicio fiscal de 2023 y el Ayuntamiento de San Miguel Xoxtla tuvo observaciones ese año por 7 millones 761 mil de pesos.
Estas denuncias y observaciones tienen molesta a Siyancan Peregrina, pues sostiene que tales irregularidades son falsas, inventos de Guadalupe Ortiz para perjudicarla.
Los pobladores de Xoxtla están inconformes porque tienen problemas de suministro de agua por fallas en la red que la misma Siyancan construyó y por los permisos autorizados por ella y los comités que manejan tres de los cuatro pozos.
El malestar es entendible. Cómo va a ceder Xoxtla a Puebla capital el 50% de los 100 litros por segundo que produce el pozo cuatro, si hay colonias y comunidades de este municipio que carecen de agua.
Siyancan Peregrina está capitalizando la inconformidad de los pobladores para responsabilizar a su sucesora de permitir que el 50% del agua que produce el pozo 4 se lo lleve Agua de Puebla o la empresa Concesiones Integrales S. A. de C. V. para la Zona Metropolitana de Puebla.
Sin embargo, hay que mencionar que en su gestión municipal, la hoy secretaria general de Morena suscribió una minuta ratificando ese acuerdo, a cambio de que Agua de Puebla invirtiera 24 millones de pesos en la construcción de una línea de conducción, equipamiento y un tanque de almacenamiento.
Opositores complicados y con liderazgos social
Para la Secretaría de Gobernación del estado, a cargo de Samuel Aguilar Pala, no será fácil negociar con los inconformes que se oponen a ceder el agua de Xoxtla a la capital poblana, y que ayer bloquearon por varias horas la autopista México-Puebla y que miércoles por la noche quemaron los tubos de conducción con destino a la Angelópolis.
Se trata de opositores y activistas con años de lucha social encabezados por Juan Carlos Flores Solís, del Frente de Pueblos en Defensa de la Tierra y el Agua de Morelos-Puebla-Tlaxcala (FPDTA-MPT).
El FPDTA-MPT participó en la defensa de los campesinos afectados por la construcción de las autovías Libramiento Norte y Sur-Poniente de Puebla, por el gasoducto Morelos que la CFE pretendía hacer en esa entidad y por la extracción de agua en los municipios y comunidades de Juan C. Bonilla, donde se asienta la empresa Bonafont, Acuexcomac y Xoxtla.
La influencia del activista Juan Carlos Flores se extiende a varios municipios de Puebla como las Cholulas, Coronango, Juan C. Bonilla, Libres y Oriental, por lo que algunos de sus seguidores estuvieron ayer presentes en Xoxtla, en la asamblea donde grupos de vecinos se manifestaron en contra del proyecto de extraer agua de este lugar para llevarla a la capital del estado.
En el sexenio de Rafael Moreno Valle, el dirigente del FPDTA-MPT fue detenido el 7 de abril de 2014, acusado de disturbios, saqueo, ataque a la obra hidráulica y extorsión, y liberado el 23 de enero de 2015.
Para Aguilar Pala, las negociaciones con los opositores de Xoxtla serán complicadas, no solo porque los vecinos están molestos por la falta de agua en varias colonias y comunidades y por la narrativa que los propios dirigentes y gobiernos de Morena han construido en torno a Agua de Puebla, sino porque los activistas que están en contra de este proyecto difícilmente se dejarán amedrentar por el secretario de Gobernación y otros funcionarios estatales de menor rango.
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