En reiteradas ocasiones, el gobernador del estado de Puebla, Alejandro Armenta Mier, ha dejado ver en sus discursos que el tema de la seguridad es, sin duda, la prioridad para su administración.
No en balde arrancó su gestión con la entrega de 50 nuevas patrullas para reforzar a las fuerzas de seguridad en la entidad, con la finalidad de fortalecer a los municipios, los cuales lucen endebles ante los embates del crimen organizado.
Sin embargo, los hechos ocurridos en Acatlán de Osorio, en donde elementos de la Marina Armada de México se enfrentaron a tiros en contra de delincuentes, quienes atacaron a los militares, con saldo de un criminal muerto y un soldado herido, dejan en claro que esta labor no va a ser nada fácil.
Por cierto, la oportuna actuación de los militares evitó una tragedia mayor por parte de Juan Vergara Vargas, quien murió en el enfrentamiento y que resultó ser hijo del ex presidente municipal de Petlalcingo, preso por delitos sexuales, sobrino de la actual alcaldesa de este lugar y también sobrino de la médico legista de Izúcar de Matamoros. Toda una fichita.
Más allá de las cifras que recientemente se dieron a conocer, creo que el nuevo secretario de Seguridad Pública en el estado, el vicealmirante Francisco Sánchez González, ya se dio cuenta del tamaño de la complejidad que va a tener que enfrentar.
No solo Acatlán de Osorio es un “foco rojo”; en pleno Año Nuevo, un grupo del crimen organizado se dio el “lujo” de ufanarse a través de redes sociales en la comunidad de Magueyes, Atzizintla, en los límites entre Puebla y Veracruz, de haber despojado de sus camionetas a dos familias. El hecho exhibe, reitero, que no va a ser nada fácil la labor del nuevo secretario, aunque hay que reconocer que apenas lleva 15 día en el cargo.
San Martín Texmelucan también representa otro reto en materia de seguridad en la entidad, al igual que la capital del estado, en donde las ejecuciones entre integrantes del crimen organizado están a la orden y son parte de un fenómeno que antes no se presentaba en Puebla.
Lo que sí hay que reconocer es que, al menos, se ve que esta administración que recién inicia no se va a quedar con los brazos cruzados para tratar de combatir el crimen, el cual creció en los últimos años gracias a la fallida estrategia de los “abrazos y no balazos”.
Lo que los poblanos hoy sí vemos, a diferencia de antes, es la intención de un Gobierno estatal de querer combatir no solo a las organizaciones criminales, sino a las causas que han fortalecido a estos grupos, no solo en Puebla, sino en el resto del país.
2025 es un año fundamental para poder medir en su justa dimensión a la nueva administración estatal, en materia de combate a la delincuencia, en un Puebla cada vez más complejo y con múltiples problemas en cada uno de sus 217 municipios.
Un ayuntamiento anárquico
Nadie acaba de entender a qué juega el Ayuntamiento de Puebla, que encabeza José Chedarui Budib.
El empresario y su gestión primero toleraron la instalación de los comerciantes ambulantes en las principales calles del Centro Histórico de la ciudad y, después, ante la presión de la ciudadanía y de la opinión pública, quiso poner orden mediante un operativo encabezado por la Guardia Nacional.
Esto, sin duda, deja en claro que no existe ninguna estrategia para trabajar con las organizaciones de ambulantes y buscar alternativas para que puedan realizar sus actividades.
Al parecer, de nada le sirvieron al alcalde capitalino los más de cuatro meses que tuvo junto con su equipo, como parte del proceso de transición, y esto no solo se ve en el tema del comercio informal, sino también en el de la seguridad pública, de la cual hemos hablado ampliamente en este espacio.
Los primeros días de Año Nuevo no son suficientes para calificar a la nueva gestión, pero lo que se ha visto hasta el momento no presagia una gestión eficiente y menos ahora que el edil capitalino se quedó ya sin el hombre que lo protegió e impulsó su carrera política, el exmandatario Sergio Salomón Céspedes, quien se va a trasladar y a concentrar en su nueva labor en la Ciudad de México.
Será muy importante ver qué tanto apoyo y coordinación le da al presidente municipal el nuevo gobernador, Alejandro Armenta; ya se verá qué tipo de relación mantienen ambos personajes.
Claudia Sheinbaum viene a Puebla
Este sábado, la presidenta de México, Claudia Sheinbaum, estará en Puebla, entidad en donde llevará a cabo su primera gira de trabajo ya bajo el mandato de Alejandro Armenta.
La presidenta visitará Huauchinango, municipio enclavado en la Sierra Norte de la entidad, y va a ser relevante el ver cómo se da la relación con el nuevo mandatario, pero también qué proyectos se podrán detonar en este año en coordinación con la nueva administración.
Hay una muy alta expectativa sobre la administración de Armenta, luego de un sexenio que se caracterizó por la inestabilidad.
Ilustración: Alejandro Medina