Se dice que en el ayuntamiento de San Pedro Cholula se está trabajando a marchas forzadas para intentar dejar los más saneado posible las finanzas de la comuna, pues está claro que el panorama que le depara a la edil de este municipio, Paola Angon Silva, no solo es gris, sino desde ahora se empieza a percibir con tintes catastróficos, dado que la alcaldesa acabó distanciada y confrontada con todas las fuerzas políticas.
Hace tres años, Angon prometía –luego de ganar los comicios locales– el poder encabezar un gobierno fuerte y con posibilidades de lograr la reelección. Había conseguido arrebatarle a la 4T el ayuntamiento cholulteca, luego de dos administraciones municipales consecutivas de Morena.
Angon triunfó en las lecciones de hace tres años con el apoyo del PAN –que es el partido donde milita–, del PRI, del PRD, de la CTM y hasta de manera encubierta de algunas facciones de Morena.
La respaldaba la mayor coalición de fuerzas políticas que se había podido constituir en San Pedro Cholula.
34 meses después, ya no existe ninguna de esas alianzas. Todo se esfumó y nadie está dispuesto a proteger a la alcaldesa una vez que acabe su gestión.
Todas las agrupaciones que llevaron a la edil al poder la abandonaron desde finales del año pasado. En mucho por los supuestos escándalos de corrupción que brotaron en los últimos tres años. Pero también porque Angón no se prestó a tener una relación de cordialidad con aquellos que en 2021 eran sus aliados.
Su apuesta para lograr salvarse del abandono político del que es objeto fue que su equipo político se dedicó a ayudar al Partido Movimiento Ciudadano a intentar ganar los comicios del pasado 2 de junio; y al mismo tiempo, se buscó por todos los medios minar la campaña electoral de Roxana Luna Porquillo, la candidata del frente del PRI, el PAN y el PRD.
Al final, perdió el Partido Movimiento Ciudadano que era la última esperanza de Angon de lograr una salida tersa del cargo de presidente municipal.
Mientras que, en el PRI, el PRD y el PAN, se ve a Paola Angon como la responsable del llamado fue “fuego amigo” en contra de la candidatura de Roxana Luna.
Mientras que en Morena, la candidata ganadora de la contienda Tonantzin Fernández, enfrenta una fuerte presión ciudadana y de las bases de la 4T, de que se deben investigar y sancionar los supuestos abusos financieros que se cometieron en el gobierno local que está viviendo su último aliento.
Surge entonces la pregunta básica: ¿Quién va a respaldar a Paola Angon cuando inicie la fiscalización de sus cuentas públicas?
Queda claro que nadie está dispuesto a “meter las manos al fuego” por la alcaldesa. Ni siquiera su hija, María de la Barreda Angon, quien se distanció de su progenitora, dejó las filas del PAN y ahora se prepara para ser una próxima diputada local de la 4T.