Dos aspectos destacan de la comida que el viernes pasado sostuvo el candidato de Morena a la gubernatura de Puebla, Alejandro Armenta Mier. El primero, el trato que le brindaron un grupo muy selecto de hombres de dinero, quienes se dieron cita en torno al anfitrión del evento, el empresario, Alfredo Rivera, quien desde el 2012 se decantó por Andrés Manuel López Obrador y desde hace tiempo también por Armenta.
El trato no fue ya de candidato, sino prácticamente de próximo gobernador de Puebla. La guerra de la percepción la viene ganando Armenta y su grupo, quienes ya nadan como patos, caminan como patos y hasta parecen patos.
El candidato de Morena a la gubernatura expuso ante los congregados una serie de proyectos de desarrollo urbano muy interesantes, entre los que destacan los temas de planeación urbana y movilidad.
Muchos de los asistentes señalaron que detrás de estos proyectos se ve de manera muy clara la mano de un personaje, Luis Antonio Godina Herrera, quien pasó del equipo de Nacho Mier al de Armenta, precisamente por su valor en términos de programas de gobierno y facilidad para financiar los mismos.
Alejandro dejó satisfechos a los empresarios congregados en torno a su figura y a la de Alfredo Rivera.
Pero, el segundo aspecto que llamó poderosamente la atención, fue la serie de personajes de los cuales se hizo acompañar a este encuentro y que generó todo tipo de especulaciones en torno a su posible gabinete.
El morenista arribó al encuentro de la mano de Bertha Richards, poderosa empresaria del sector de la construcción, de Víctor Gabriel Chedraui, quien se dice pudiera estar al frente de Administración, del empresario Rafael Moreno Valle Buitrón, quien se comenta pudiera hacerse cargo de Economía, y de Juan Manuel Vega Rayet, su amigo y gente de confianza a quien muchos ven al frente de Desarrollo Social.
Por supuesto, esto son meras conjeturas de algunos que estuvieron presentes en este encuentro, pero lo que sí es un hecho es que estos personajes gozan de la confianza y la cercanía del puntero en la lucha por Casa Aguayo.
Lo que más les cautivó a los presentes en este encuentro, fue la promesa del candidato, de que la mayor parte de los proyectos que se detonen durante su administración, en caso de ganar la gubernatura, serán ejecutados por empresas poblanas. Ojalá así sea.
El 22, Armenta en la BUAP. Tras un muy intenso cabildeo, la rectora Lilia Cedillo Ramírez, aceptó abrir las puertas de la máxima casa de estudios en el estado a los candidatos a la gubernatura de Puebla, sólo a ellos.
La rectora, en un inicio, se había mostrado reacia a abrir las puertas de la máxima casa de estudios a los candidatos, se convenció luego de escuchar a sus asesores, accedió convencida de que la universidad debe de estar abierta a escuchar a todas las expresiones.
Por esta razón, el desfile de candidatos a la gubernatura de Puebla, arrancará con el puntero, Alejandro Armenta Mier, quien expondrá ante el máximo órgano de gobierno de la BUAP, el Consejo Universitario, el próximo lunes. Días después lo harán también los candidatos del PAN, Eduardo Rivera Pérez y de Movimiento Ciudadano, Fernando Morales Martínez.
Es muy importante la apertura que ha demostrado la máxima casa de estudios, para abrir sus puertas a todos aquellos que buscan regir los destinos de la entidad durante los próximos seis años.
Puebla merece más. Ayer, la ciudad de Puebla cumplió 493 años de haber sido fundada por los españoles. A solo siete años de celebrar sus 500 años, es necesario replantear qué es lo que queremos y a dónde nos pretenden llevar, quienes buscan gobernar la ciudad y el estado.
Hay muchos temas pendientes, entre los más urgentes desde mi punto de vista están los que tienen que ver con la falta de agua potable, movilidad y planeación urbana, seguridad y nuevos centros de abasto. Claro, Puebla merece más, merece gobiernos a la altura de su grandeza, pero sobre todo de sus habitantes, razón por la cual somos, orgullosamente poblanos.