Se aproxima el inicio de una nueva temporada de huracanes en las áreas del Atlántico y Pacífico, donde se espera una mayor formación de ciclones debido a las condiciones climáticas previstas.
Para la temporada de huracanes de 2025, se mantienen las fechas oficiales: del 15 de mayo al 30 de noviembre en el océano Pacífico, y del 1 de junio al 30 de noviembre en el Atlántico, de acuerdo con el Centro Nacional de Huracanes (NHC, por sus siglas en inglés).
El NHC, con datos de la Organización Meteorológica Mundial, dio a conocer los nombres que llevarán los ciclones que se presenten durante la temporada de huracanes de este año:
Océano Atlántico: Andrea, Barry, Chantal, Dexter, Erin, Fernand, Gabrielle, Humberto, Imelda, Jerry, Karen, Lorenzo, Melissa, Nestor, Olga, Pablo, Rebekah, Sebastien, Tanya, Van y Wendy.
Océano Pacífico: Alvin, Barbara, Cosme, Dalila, Erick, Flossie, Gil, Henriette, Ivo, Juliette, Kiko, Lorena, Mario, Narda, Octave, Priscilla, Raymond, Sonia, Tico, Velma, Wallis, Xina, York y Zelda.
Los nombres llegan a ser reutilizados cada seis años, aunque aquellos que lleguen a causar daños graves en algunas regiones son retirados de la lista.
Los pronósticos de organismos meteorológicos indican que las regiones del Golfo de México y el Caribe podrían llegar a ser las más afectadas por la temporada de huracanes, luego de que en 2024 se registraran 30 tormentas tropicales, de las cuales la mitad evolucionaron a huracanes.
Los modelos climáticos sugieren que la temporada de huracanes 2025 podría ser similar o incluso superior a la media histórica, con al menos 15 tormentas tropicales esperadas en el Atlántico, de las cuales 7 podrían convertirse en huracanes, y al menos 3 alcanzarían categorías mayores.
Por otro lado, en el Pacífico se anticipa con una actividad ciclónica moderada a alta. Aunque el fenómeno de La Niña puede influir en la intensidad y frecuencia de los ciclones, su efecto en el Pacífico es menos claro y puede incluso reducir la formación de ciclones. Estados como Chiapas, Oaxaca y Guerrero deben estar preparados para posibles lluvias intensas y deslaves