Una aeronave Gulfstream II, matrícula XC-LPY, propiedad de la Fiscalía General de la República (FGR) aterrizó de emergencia la tarde de este martes en el Aeropuerto Internacional Felipe Ángeles (AIFA).
El avión, un jet de negocios tanscontinental, tocó tierra en la terminal aérea de Santa Lucía a las 16:15 horas, procedente del Aeropuerto Internacional General Mariano Escobedo de Monterrey, Nuevo León.
La aeronave fue canalizada al AIFA por las autoridades aeroportuarias de los Servicios a la Navegación en el Espacio Aéreo Mexicano (Seneam), debido a que, al tratar de aterrizar en el Aeropuerto Internacional de la Ciudad de México (AICM), presentó fallas en su tren de aterrizaje de nariz.
La aeronave logró aterrizar en el AIFA, “por presentar (este) mayor capacidad de seguridad,debido a la tecnología con la que cuenta (…), extensión de la pista de aterrizaje y el servicio de salvamento, extinción de incendios (SSEI), que lo coloca en la categoría 9 de seguridad aeroportuaria”, precisó el propio aeropuerto en un comunicado.
Aunque el jet de la FGR quedó “de nariz” en la pista de aterrizaje del AIFA, ninguna de las seis personas que transportaba –entre pasajeros y tripulación– presentó daños y todo quedó en pérdidas materiales que no han sido cuantificadas.
Debido al poco tráfico aéreo que registra el Aeropuerto Internacional Felipe Ángeles, tras el incidente del Gulfstream II de la FGR, las operaciones aéreas habituales continuaron desarrollándose con normalidad.