Un migrante mexicano murió bajo custodia del ICE en Georgia, convirtiéndose en el segundo caso en menos de dos meses en esa misma instalación. Jesús Molina Veya, de 45 años, fue hallado inconsciente con una ligadura en el cuello en el Centro de Detención de Stewart, operado por la empresa privada CoreCivic y ubicado en Lumpkin, Georgia.
El Servicio de Inmigración y Control de Aduanas (ICE, por sus siglas en inglés) informó que el 7 de junio, personal del centro detectó una aglomeración de detenidos frente a una celda. Al ingresar, encontraron a Molina Veya en estado inconsciente. Intentaron reanimarlo y lo trasladaron al Hospital Phoebe Sumter, donde fue declarado muerto a las 6:42 p.m.
La causa de muerte aún se investiga, pero ICE ya notificó al Inspector General del DHS, a su propia Oficina de Responsabilidad Profesional y al Consulado de México en Atlanta.
El historial de Molina indica múltiples ingresos irregulares a EE.UU. desde 1999, con deportaciones previas y antecedentes penales. Su detención más reciente ocurrió en febrero por violar libertad condicional.
Este fallecimiento se suma al de Abelardo Avelleneda Delgado, otro migrante mexicano de 68 años, quien murió el 5 de mayo mientras era trasladado a la misma instalación. En lo que va del año, ya son ocho las muertes bajo custodia del ICE, lo que ha generado severas críticas por las condiciones en estos centros, especialmente los gestionados por compañías privadas.
Organizaciones de derechos humanos han denunciado negligencia médica, maltrato y falta de atención adecuada en estos recintos, donde migrantes permanecen detenidos por tiempo indefinido en condiciones cuestionadas a nivel internacional.