El secretario del Departamento de Defensa de Estados Unidos, Pete Hegseth, negó haber enviado en un grupo privado de mensajería planes de ataque contra los rebeldes hutíes en Yemen, tras darlo a conocer el director de la revista The Atlantic, Jeffrey Goldberg.
“Nadie estaba enviando planes de guerra y eso es todo lo que tengo que decir al respecto”, declaró.
Jeffrey Goldberg, periodista del medio estadounidense The Atlantic, al parecer fue incluido en un chat en el que estaban altos cargos de la administración estadounidense.
Goldberg hizo pública su historia en un artículo titulado “La Administración de Trump accidentalmente me mensajeó sus planes de guerra”, donde dio a conocer que Mike Waltz, asesor de seguridad de la Casa Blanca, creó a principios de marzo un grupo de chat y fue agregado en una conversación, en la que hablaron de los ataques, así como detalles sobre las armas utilizadas, los objetivos y el horario programado.
De acuerdo con el periodista, el grupo no solamente funcionaba con fines logísticos, sino que también servía para discutir las decisiones que se estaban tomando.
Asimismo, indicaba que el chat filtrado incluía figuras importantes como el vicepresidente, JD Vance; el secretario de Defensa, Pete Hegseth; el de Estado, Marco Rubio, e incluso la directora Nacional de Inteligencia, Tulsi Gabbard, y el director de la Agencia Central de Inteligencia (CIA), John Ratcliffe.
Finalmente, Goldberg señala que los planes eran reales cuando el 15 de marzo comenzó a ver en redes sociales reportes de explosiones en Saná, la capital de Yemen, justo a la hora que había descrito el secretario de Defensa.
“Habiendo llegado a esta conclusión, que parecía casi imposible solo unas horas antes, me retiré del grupo Signal, entendiendo que esto notificaría de forma automática al creador del grupo, ‘Michael Waltz’, que me había ido”, dijo.
Según el diario The Washington Post, Brian Hughes, portavoz del Consejo de Seguridad Nacional de la Casa Blanca, dijo que los mensajes revelados por Goldberg, parecían ser “auténticos” y que el gobierno estaba “revisando cómo se agregó un número inesperado a la cadena”.
Dos horas después de la publicación, Trump aseguró que no tenía conocimiento del artículo publicado.
“No sé nada al respecto. No soy un gran fan del Atlantic. Para mí es una revista que va a desaparecer. Creo que no es una gran revista. Pero no sé nada de ella”, expresó.