En el centro de la atención internacional se encuentra el reciente ataque israelí al hospital Al Aqsa en Gaza , durante el cual cuatro personas perdieron la vida y otras 17 resultaron heridas, incluyendo miembros de un equipo de la Organización Mundial de la Salud (OMS) que estaban llevando a cabo una misión humanitaria en el lugar.
Según el director de la OMS, Tedros Adhanom Ghebreyesus, el personal de la organización se encontraba realizando labores humanitarias dentro del hospital cuando fue alcanzado por el bombardeo israelí.
En respuesta, la OMS ha reiterado la necesidad urgente de proteger a los pacientes, al personal médico y a las misiones humanitarias en zonas de conflicto, haciendo un llamado al cese de los ataques y a respetar el derecho internacional humanitario.
Este incidente se produce en medio de un contexto de violencia continua en la región, con un saldo devastador de miles de muertes y heridos desde el inicio del conflicto. Mientras tanto, tanto Hamas como Israel se han acusado mutuamente de provocar y perpetuar la escalada de violencia.
A pesar de la condena internacional y los llamados a la calma, la situación en la región sigue siendo volátil, con repercusiones humanitarias cada vez más graves. La comunidad internacional continúa presionando para lograr un alto el fuego y avanzar hacia una solución negociada que ponga fin al derramamiento de sangre y restaure la paz en la región.
Los primeros momentos de los bombardeos israelíes contra una tienda de campaña en el hospital de Shuhda Al-Aqsa en Gaza. pic.twitter.com/4MA7t3JIS0
— Palestina Hoy (@HoyPalestina) March 31, 2024