El gobernador de Puebla, Alejandro Armenta Mier, anunció que solicitará una auditoría integral a la construcción del Teleférico de Puebla, obra que calificó como un “monumento a la corrupción” de administraciones pasadas. Según el mandatario, el costo de desmontar, trasladar y volver a operar el teleférico ascendería a más de 26 millones de pesos, lo que evidencia posibles irregularidades financieras en su ejecución.
“Desmontarlo cuesta 3.5 millones de euros, montarlo en otro sitio otros 3.5 millones y ponerlo a funcionar 1.2 millones más. Son cerca de 26 millones de pesos”, explicó Armenta durante su conferencia matutina, donde también instruyó a la Fiscalía General del Estado (FGE) y a la Secretaría de Finanzas iniciar las investigaciones correspondientes.
El mandatario advirtió que su gobierno no permitirá más abusos ni saqueo por parte de servidores públicos. “Que se investigue y se sancione a quienes resulten responsables. Puebla ya no será un estado de saqueo”, enfatizó.
Armenta también criticó los esquemas de asociación público-privada (APP), como el utilizado para construir el Museo Internacional del Barroco, que actualmente representa un gasto de 523 millones de pesos anuales para el estado. “Aún restan 15 años de pagos. Esto equivale a más de 9 mil millones de pesos, con los que se podrían construir casi 500 escuelas”, puntualizó.
Rechazó que su administración realice obras con fines de auto-promoción, asegurando que no colocará su nombre en ningún proyecto. “Las obras deben ser para Puebla, no para el ego del gobernador”, dijo.