Beatriz Manrique Guevara, titular de la Secretaría de Medio Ambiente, señaló que los tres barcos adquiridos en la administración de Antonio Gali Fayad, solo sirven para eliminar malos olores y reducir los mosquitos en la presa de Valsequillo.
La secretaria señaló que en el mandato de Gali Fayad se compararon tres barcos por un monto de 209 millones de pesos para limpiar la presa de Valsequillo; sin embargo, acusó que estos no solo se compraron a un sobre costo, sino que no pueden limpiar toda la presa Manuel Ávila Camacho, pues las dimensiones del cuerpo de agua exceden sus capacidades, por lo que se utilizan para ahuyentar a los mosquitos de la zona.
Señaló que la contaminación de la presa tampoco ayuda, por lo que dichos barcos no cumplen la tarea para la que fueron comprados, “además que tiene una duración de muy corto plazo los efectos de la hiperoxidacion, por lo que estas 710 horas de trabajo que tienen los barquitos, se han hecho con una estrategia de hacerlo de forma ribereña para ayudar a la disminución de olores y para también disminución de mosquitos”.
Manrique Guevara señaló que además de no cumplir su función, su manutención representa un gasto constante para el Gobierno de Puebla, pues cada embarcación necesita servicio, además de que cada nave tiene su propia tripulación.
El alcalde de Chignahuapan, Lorenzo Rivera Nava, señaló que a su gobierno le interesa que una de las embarcaciones sea trasladada por el estado a una laguna de su municipio. El edil justifica está decisión al sostener que se puede utilizar para triturar el lirio que se ha asentado, pese a que se han realizado ya algunas visitas por parte de la Secretaría del Medio Ambiente.
El Gobierno de Puebla adquirió en 2018 tres botes Scavenger 2000, mismos que entraron en operación en noviembre de dicho año, la idea detrás de la compra es que estos limpiaran Valsequillo para que los poblanos pudieran nadar en sus aguas como en el pasado; sin embargo, no lograron su cometido.
El gobierno planea retirar las barcas de Valsequillo para llevarlas a otros cuerpos de agua al interior del estado donde puedan realizar sus labores de saneamiento. Los municipios que podrían ser los primeros en beneficiarse con las barcas son: Chignahuapan, Epatlán y la presa de Necaxa.