Netflix dio un golpe histórico en la industria del entretenimiento al anunciar la adquisición de Warner Bros. Discovery (WBD), incluidos los estudios de cine y televisión, HBO y la plataforma HBO Max, en una operación valuada en 82 mil 700 millones de dólares. El acuerdo fue confirmado este viernes mediante un comunicado conjunto de ambas compañías y se perfila como una de las mayores fusiones en la historia del sector audiovisual.
La transacción se concretará una vez que se complete la separación de Discovery Global, división de televisión que agrupa CNN, TNT Sports, Discovery+ y canales europeos en abierto. Esta escisión –necesaria para proceder con la compra– se prevé para el tercer trimestre de 2026.
La oferta final de Netflix fue de 27.75 dólares por acción, superando la propuesta inicial de Paramount y la puja de Comcast. Aunque Paramount había sido considerada la favorita durante semanas, la plataforma de streaming sorprendió con dos ofertas de última hora que la colocaron al frente. Incluso aceptó una cláusula de rescisión millonaria similar a la planteada por su competidor, lo que reforzó su posición en el proceso.
El presidente y director ejecutivo de WBD, David Zaslav, celebró el movimiento asegurando que “el anuncio de hoy une a dos de las compañías de narrativa más importantes del mundo para llevar a aún más personas el entretenimiento que más disfrutan”. Por su parte, Greg Peters, codirector ejecutivo de Netflix, afirmó que Warner Bros. “ha ayudado a definir el entretenimiento durante más de un siglo”, y que la unión permitirá ampliar el alcance global de contenidos icónicos como Game of Thrones, The Sopranos, The Big Bang Theory, The Wizard of Oz y el universo DC.
Si se concreta, esta megafusión transformará radicalmente el panorama de Hollywood. Sin embargo, el acuerdo deberá superar una intensa revisión regulatoria en Estados Unidos y otros mercados. Legisladores como el senador Mike Lee ya advirtieron posibles riesgos para la competencia al integrar a dos de las mayores potencias del streaming y la producción audiovisual. Organizaciones como Cinema United también han expresado preocupación por el posible impacto en la exhibición cinematográfica.
Netflix, anticipándose a las críticas, aseguró que mantendrá las operaciones actuales de Warner Bros. y que seguirá apoyando los estrenos en salas de cine.
La compra marcaría el fin simbólico de una década de rivalidad entre Netflix y HBO, y podría consolidar al gigante del streaming como la fuerza dominante del entretenimiento global. Un reporte de Bank of America fue contundente: “si Netflix adquiere Warner Bros., la guerra del streaming habrá terminado”.
El cierre de la operación está previsto entre 12 y 18 meses, dependiendo del avance regulatorio y del proceso de escisión de Discovery Global.




