El icónico programa Saturday Night Live (SNL) sorprendió en el estreno de su temporada 51 con un homenaje inesperado: una parodia de El Chavo del 8, la legendaria comedia creada por Roberto Gómez Bolaños “Chespirito”. El momento más comentado de la noche llegó cuando Bad Bunny, anfitrión del episodio, apareció caracterizado como Quico, imitando sus gestos, cachetes inflados y peculiar voz.
El sketch, que cerró el programa, trasladó a la famosa vecindad mexicana al escenario estadounidense, con un elenco de lujo: Marcello Hernández interpretó a El Chavo, Sarah Sherman a La Chilindrina, Jon Hamm encarnó al Profesor Jirafales y Kenan Thompson apareció como “Mr. Stomach”, la versión americana del Señor Barriga.
Entre la nostalgia y el surrealismo
La recreación incluyó momentos clásicos: las discusiones entre Don Ramón y Quico, las cachetadas de Doña Florinda y hasta la eterna deuda de la renta. Todo acompañado de risas grabadas y efectos sonoros que evocaron el estilo inconfundible del programa original.
Las redes sociales no tardaron en reaccionar: para muchos, fue un homenaje entrañable a la cultura latina; otros lo calificaron como un giro extraño para la televisión estadounidense. Sin embargo, el sketch se volvió viral en cuestión de minutos, coincidiendo con el gran momento que vive el reguetonero, recientemente confirmado como protagonista del show de medio tiempo del Super Bowl LX.
El legado de Chespirito sigue vivo
La aparición del universo de Chespirito en SNL llega en un contexto donde su legado ha vuelto a la conversación pública. Mientras la serie biográfica Chespirito: Sin querer queriendo genera polémica en HBO Max, la parodia en la televisión estadounidense confirmó que El Chavo del 8 sigue siendo un fenómeno cultural vigente.
Con más de 300 episodios aún en retransmisión en distintos países y disponible en plataformas como Vix, la vecindad más famosa de México volvió a conquistar corazones, esta vez de la mano de Bad Bunny y un show de comedia que, desde hace décadas, marca pauta en la cultura pop global.