En una noche de alta tensión en el Santiago Bernabéu, el Manchester City de Pep Guardiola dio un golpe de autoridad al remontar un gol en contra y vencer 2-1 al Real Madrid de Xabi Alonso, en lo que podría ser el principio del fin para el técnico vasco en el banquillo blanco.
El partido, correspondiente a la Jornada 6 de la fase de liga de la UEFA Champions League, dejó al City en el cuarto puesto de la tabla, superando a su rival por un punto, y con pie y medio en los octavos de final.
El estadio, abarrotado con más de 80 mil almas enfervorizadas, presenció un primer tiempo de idas y venidas que terminó con los blancos ilusionados, pero un segundo acto donde los citizens tomaron el control absoluto. Rodrygo, que rompió una sequía de 32 partidos sin marcar, abrió el marcador en el minuto 28 con un potente disparo raso tras un contragolpe letal liderado por Vinícius Júnior y Gonzalo García. El brasileño, en un destello de su mejor versión, celebró con rabia contenida, devolviendo momentáneamente la esperanza a una afición madridista que llega a este duelo con el agua al cuello: dos derrotas consecutivas en casa y un Xabi Alonso cuestionado por primera vez en su etapa como sucesor de Carlo Ancelotti.
Video: Redes sociales
Sin embargo, el City no es equipo de rendirse. Solo ocho minutos después, en el 36, Erling Haaland, el depredador noruego que ya suma 55 goles en Champions, igualó de penalti, tras una falta clara de Antonio Rüdiger sobre Savinho en el área. El tiro, con la precisión quirúrgica habitual de Haaland, dejó clavado a Thibaut Courtois y desató la euforia en el banquillo visitante. Pero el mazazo definitivo llegó en el 43, justo antes del descanso: un córner mal defendido por la zaga blanca permitió a Nico O’Reilly, el canterano de 20 años formado en La Masía desde los 8, empujar a puerta vacía el 1-2. Su primer gol en la competición europea, y qué manera de estrenarse: contra los reyes de la Copa de Europa.
La segunda mitad fue un monólogo citizen. Con un 55.7% de posesión y seis disparos a puerta por solo uno de los locales, Guardiola, que vio una amarilla por protestar a la francesa Clément Turpin, manejó los hilos con maestría. Rodri y Bernardo Silva dictaron el ritmo desde el medio, mientras Haaland y Julián Álvarez rondaban como lobos.
El técnico destaca la valentía de Nico 🤩 pic.twitter.com/wn7feBshUq
— Manchester City (@ManCityES) December 11, 2025
El Madrid, con Kylian Mbappé relegado al banquillo por un problema muscular, su ausencia fue el peor augurio de la noche, apenas generó peligro. Endrick, el joven brasileño, rozó el empate en el 89 con un cabezazo al travesaño, pero ya era tarde. El pitido final desató la tormenta: silbidos a Alonso en su regreso al túnel y cánticos de “¡Florentino, dimisión!” que resonaron en las gradas.
Este resultado no solo altera la tabla, Arsenal lidera con autoridad, seguido de cerca por Liverpool, sino que revive la eterna rivalidad entre estos colosos. Desde la temporada 2012/13, ningún duelo en Champions se ha repetido tanto: seis victorias madridistas, cinco citizens y cinco empates. Pero hoy, en el coliseo blanco, el City escribió el capítulo más reciente con letra de oro. Por ahora, el Bernabéu llora y Manchester celebra.
