El defensa de los Rayados de Monterrey, Severo Meza, compareció hoy ante la prensa con un vendaje en la frente como consecuencia del golpe con una pistola que sufrió el domingo durante un asalto.
El jugador, de 25 años, es el segundo de la plantilla del equipo regiomontano que es asaltado en menos de un año. En 2011 el centrocampista ecuatoriano, Walter Ayoví, fue despojado de su camioneta por hombres armados.
Meza, quien se ausentó ayer de los entrenamientos y hoy volvió al equipo, fue atacado la noche del domingo ante su familia, poco después de asistir a una cena.
“No fue un grata experiencia. Fui golpeado, pero estamos bien”, manifestó el jugador para quien la inseguridad en la ciudad de Monterrey “es para todos” sus habitantes.
Negó que tenga intención de buscar una transferencia y garantizó que su deseo es volver a la rutina.
“Lo mejor para mí es entrenar, exigirme y seguir con la motivación. Físicamente estoy bien, sólo con un golpe en la frente, pero en condiciones de ser tomado en cuenta si el entrenador me necesita”, dijo el zaguero
