En el corazón de la provincia de Quebec, se encuentra una joya urbana que fusiona la elegancia europea con la vibrante diversidad cultural; Montreal. Esta ciudad, la segunda más grande del país, es un destino turístico imperdible que cautiva a sus visitantes con su rica historia, atractivos turísticos únicos y una oferta cultural que la convierte en un mar de experiencias inolvidables.
La historia de Montreal se remonta a la época de los pueblos indígenas, pero fue en 1642 cuando se fundó oficialmente como una colonia francesa. A lo largo de los años, pasó por manos francesas y británicas, y esta influencia dual se refleja en su arquitectura, idioma y cultura. La histórica ciudad vieja, conocida como “Vieux-Montréal”, es un testimonio vivo de su pasado, con calles empedradas, edificios con fachadas de época y un ambiente encantador que te transporta en el tiempo.
Hoy te comparto algunos sitios que puedes visitar cuando estés de viaje por allá;
Basílica de Notre-Dame: Esta magnífica iglesia gótica es un ícono de Montreal. Su interior deslumbra con una impresionante combinación de colores, vitrales detallados y una arquitectura que te deja sin aliento. No es solo un lugar de culto, sino también una obra de arte histórica. La entrada a la Basílica incluye un tour guiado de 20 minutos con una presentación de su historia, arquitectura y arte. También se puede asistir a una misa o tomar un tour extendido para conocer la sacristía, las galerías y el baptisterio.
Monte Royal: El nombre de la Ciudad de Montreal, proviene de esta montaña. El Parque Mont-Royal ofrece una vista panorámica de la ciudad, especialmente al atardecer. Además de ser un lugar perfecto para un paseo tranquilo, también ofrece senderos para caminatas y actividades al aire libre, uno de los mayores atractivos de este lugar son los tam-tams, reunionessemanales de bateristas, bailarines, vendedores y mucho más. Frederick Law Olmstead, fue el creador de este parque, al igual que el del Central Park, en Nueva York.
Museo de Bellas Artes: Con una impresionante colección que abarca desde el arte clásico hasta el contemporáneo, este museo es un festín visual para los amantes del arte. Sus exposiciones permanentes y temporales aseguran que siempre haya algo nuevo que descubrir. Fundado en 1860, el museo es el más visitado en Canadá y atrae a más de 1 millón de amantes del arte cada año.
Sainte Catherine Street: Es el barrio para hacer tus compras en Montreal. Ya sea que andes buscando diseñadores de alto nivel, cadenas de tiendas, boutiques locales o solo souvenirs, lo podrás encontrar en esta calle. Con nueve millas de longitud, Sainte Catherine Street cruza el centro de Montreal de este a oeste. Podrás caminarla por horas y encontrar siempre una experiencia diferente en cada esquina. Los restaurantes, bares y cafés perfilan la calle, lo cual lo hace muy accesible en autobús o metro.
Algunas experiencias inolvidables de este destino son;
Asistir al Festival Internacional de Jazz de Montreal, si tienes la oportunidad de visitar en verano, este festival es un evento musical impresionante. Las calles se llenan de música en vivo, desde jazz hasta otros géneros, y la atmósfera es festiva y contagiosa.
Descubrir la ciudad subterránea, dado el frío invierno de Montreal, la ciudad ha desarrollado una forma única de descubrir la ciudad sin enfrentar las inclemencias del clima. Montreal alberga algo que se llama El RÉSO, es una red de aproximadamente 20 millas de caminos subterráneos y túneles que conectan a los centros comerciales, estaciones de metro y edificios. Los acceso a esta red están en la calle, en nueve hoteles principales y ocho estaciones de metro distintas, y tienes acceso a 2,000 tiendas, 17 museos, una arena de hockey, un cine, clubs nocturnos y un sin número de restaurantes y negocios. Es impresionante ver una mini ciudad debajo de la gran ciudad.
¡Viajemos Juntos!