En el concierto de la reciente crisis entre México y Estados Unidos y el golpeteo de algunos medios de ultraderecha contra el Estado mexicano, no puede verse ingenuamente como una coincidencia la reaparición del oscuro Facundo Rosas Rosas, quien como funcionario federal fue uno de los hombres fuertes de Genaro García Luna, extitular de Seguridad con el panista Felipe Calderón y hoy condenado en Estados Unidos a 38 años de prisión, por sus relaciones delincuenciales.
Menos todavía se puede suponer que tenga una intención periodística genuina su aparición en el programa, que se transmite por Internet, “Cuchara Cuchillo Tenedor”, para dar clases sobre seguridad, migración y lucha contra el narcotráfico.
No puede suponerse que este hecho esté ausente de la campaña mediática que busca sacar raja de la crisis comercial y de seguridad que, con el regreso de Donald John Trump a la Casa Blanca, han tratado de azuzar grupos de ultraderecha.
En esa pieza que está en YouTube y otras plataformas, tampoco podemos ser tan ingenuos y pasar por alto que uno de los conductores, que con tanta insistencia y visceralidad ha golpeado al Gobierno estatal y a la presidenta Claudia Sheinbaum Pardo, me refiero a Rodolfo Ruiz Rodríguez, sea quien saque el tema de Trump y de migración para tender una alfombra roja a los pies de Facundo Rosas Rosas, para que se luciera el excomisionado de la extinta Policía Federal Preventiva (PFP) y quien fue el secretario de Seguridad Pública con el derechista ya fallecido Rafael Moreno Valle Rosas, cuando fue gobernador.
Por cierto, Facundo ocupó ese cargo, coincidentemente, en los tiempos en que más crecieron las tomas clandestinas de combustible en el valle poblano de Tepeaca-Tecamachalco.
Es imposible pasar por alto todos esos datos.
La presidenta Sheinbaum y el gobernador Alejandro Armenta han defendido con firmeza a los migrantes mexicanos y poblanos. Ella y él han dicho sin eufemismos que la soberanía no se negocia y que la patria no está en venta.
Hay también un sector de la ultraderecha, con miembros que operan desde las sombras o con irracionalidad en las redes sociales, que con pensamientos antipatriotas han festejado incluso las posibilidades injerencistas. Ellos y ellas y sus medios de difusión han sido tildados de traidores a la patria.
Facundo Rosas Rosas ha sido recurrente colaborador y hasta pareciera que consejero de Rodolfo Ruiz Rodríguez, incluso en los tiempos en que el expolicía fue enjuiciado y señalado en varios procesos penales.
El periodista Arturo Luna escribió este jueves en su cuenta de X (antes Twitter), sobre el mismo programa en el que también participan Jesús Manuel Hernández y Xavier Gutiérrez:
“Como cuando un ex convicto se pone a querer dar clases de moral y buenas prácticas en materia de #seguridad.
”El ejecutor de la ‘Ley Bala’, Facundo Rosas, reapareció como lo que es: un muerto viviente de la clase política.
”En una reciente entrevista de prensa, dijo que para mejorar la seguridad hace falta más que nuevas patrullas. Lo que NO dijo es que él, como secretario de Seguridad, fue quien abrió las puertas de #Puebla a los huachicoleros y otros grupos de la delincuencia organizada.
”Y por eso estamos como estamos.
”Facundo Rosas, el flamante ex comisionado de la extinta Policía Federal, estuvo en el Reclusorio Norte por el crimen de una mujer –a la que atropelló– y en el Centro de Readaptación Social número 11 en Aguaprieta en Hermosillo, Sonora, por su presunta participación en el caso conocido como ‘Rápido y Furioso’, con el que ingresaron millones de armas de Estados Unidos a México.
”De eso tampoco dijo NADA”, escribió el periodista Arturo Luna.
Todo lleva a varias preguntas y nada se puede pasar por alto.
Hay una campaña contra el Estado mexicano. Las acusaciones de Donald Trump han tenido, como uno de sus ejes, los señalamientos contra García Luna para concatenar que hay colusión de México con grupos delincuenciales, una descalificación injusta, que la presidenta ha sabido frenar.
Los hechos están ahí.
Como el propio Rodolfo Ruiz suele escribir: “las coincidencias, en política, no existen”.
