El Operador de Operadores y Gobernador electo del estado de Puebla, logró ungirse con el triunfo con un 2 a 1 respecto a su contrincante su más cercano contrincante Eduardo Rivera y además logró hacerse de la medalla del gobernador más votado en la historia política moderna poblana. Esto no se logra de la noche a la mañana ni con novatos. Así que aquí hay 10 enseñanzas que nos deja él, y seguramente serán muchas más, y seguramente sus equipos tendrán muchas más, y seguramente, algunos y algunas, aunque estuvieron cerca, nunca las notaron, o quizá sí.
1. Sumar, sumar, sumar, sumar y sumar… hasta al enemigo Alejandro Armenta seguramente sabía que muchos de los que sumaba, si los tenía demasiado cerca, le iban a restar. Pero si al sumar tienes perfectamente estudiado qué quieren y en qué esto suma a su campaña y al triunfo, súmalos poniendo a cada uno en su justa medida.
2. Lo medios de comunicación son aliados no enemigos…. Es el único hombre de la 4t que trato (como debe ser y siempre deber ser así) con trato digno a los representantes de los medios de comunicación, a los reporteros y reporteras que se parten en 10 en una campaña y que se agradece que el trato sea digno y no de desplantes o de desinformación.
3. Si te tocó ser el goleador a lado de centro campistas, medio campistas y punteros que no dan el ancho, pues ni modo, es el equipo que te tocó. No era para nada un secreto y a todas luces se veía que algunas candidatas y candidatos sobre todo los neonatos y neonatas, le restaban y era mejor quizá dejarlos guardados y hacer campaña sin estos personajes, pero Armenta se mantuvo firme a que era el equipo de futbol todo aunque tuviera que arrastrarlos para poderles hacer ganar. Los sobrados de protagonismo, los que tienen una pésima relación con la prensa, los que tienen dos cacahuates uno de hemisferio derecho y otro de izquierdo, quizá se cuelguen los votos y no agradezcan a quien los tuvo que jalar pero eso, seguramente también lo espera Armenta.
4. Todos los días, aunque vayas 10, 15, 20, 30, 40, 50 o 60 puntos arriba, lucha, camina, recorre, como si fueras 50 puntos abajo. Ni un solo día dejó de recorrer los lugares más alejados del estado de Puebla, y también la capital y también la zona conurbada, con la mayor humildad, furia y fuerza de un ganador; sin soberbias jamás nadie vio un gesto de soberbia alguno en él porque su carácter forjado a lo largo de 30 años de política quizá le hizo ver caer a muchos que – como decía mi abuelita- “se suben en un ladrillo y se marean”
5. Si haces una promesa, cúmplela o si no, no la hagas… se comprometió con la virtual primera presidenta de México, en mi imaginación los veo sentados a ellos dos solos haciendo un pacto de camaradería en el que Armenta comprometió darle el mayor número de votos en Puebla para ella y hacer ganar a la gran mayoría de legisladores locales y federales que permitieran darle curso al proyecto de Nación de Sheinbaum, y se lo cumplió.
Nos faltan las otras 5 enseñanzas; las mejores son para cerrar con broche de oro en la próxima entrega, enseñanzas de territorio y que el Día D no se debe dejar ni al destino ni a una sola estructura.
Así que nos leemos en la próxima
Twitter: @AlesandraMartin