Por: Gerardo Ruiz / @GerardoRuizInc
La pésima gestión que hasta el momento ha encabezado Genoveva Huerta al frente del Comité Directivo Estatal del PAN tiene sumido al parido azul en una seria crisis interna en la que existen dos grupos muy marcados que disputarán las principales candidaturas de representación popular y de mayoría relativa para el proceso electoral del 2021.
En apenas un año y medio como presidenta del CDE panista, Huerta Villegas, por su falta de capacidad y su ideología morenovallista, logró crear una severa ruptura en tiempos en los que la unidad y la sincronía eran primordiales para que Acción Nacional lograra reinventarse tras el yugo del siniestro Rafael Moreno Valle y tras la derrota del 2018 que los dejó en ruinas al perder el gobierno del estado, la mayoría de sus bastiones históricos en la entidad como San Andrés Cholula y Puebla capital, y la mayoría en el Congreso local.
Sin embargo, “La Jefa Geno” en lugar de impulsar una agenda común en la que todos los liderezgos del verdadero panismo, que fue exiliado por años por la tiranía de Moreno Valle, fueran incluidos prefirió entregarle las riendas del albiazul a otro perfil externo alejado de los ideales del partido, el cual, otra vez, está siendo utilizado como en los tiempos del oscuro régimen morenovallista.
Así, las vacas sagradas del panismo local cerraron filas para rebelarse a su lideresa estatal, la cual llegó al cargo a través de una burda imposición operada por Martha Erika Alonso, con el único objetivo de derrocarla de la presidente del Comité Estatal del partido.
Y es que, Genoveva Huerta ya destapó su juego rumbo a los comicios del próximo año, el cual, como huérfana ejemplar de Rafael, consiste en agandallarse la primera posición de la lista plurinominal al Congreso del estado para amarrar una curul en la LXI Legislatura, además de apropiarse para su grupo de liliputienses de las principales candidaturas a alcaldes y diputados locales de la capital y la zona metropolitana, y de paso, ejercer un veto al grupo de Eduardo Rivera.
Pero, los panistas de cepa no tienen pensando cruzar los brazos y ver cómo Huerta se apropia del tablero azul del ajedrez del 2021.
Se equivocan una vez más quienes han asegurado que Genoveva Huerta tiene amarrada la primera “pluri” al Congreso del estado, pues esta lista será avalada por la Comisión Política del PAN, máximo órgano rector del partido que palomeará los métodos y la lista de aspirantes para los cargos que estarán en disputa en el proceso del próximo año.
Si bien los genovistas (llamar “huertistas” al grupo de enanos de Genoveva es ponerlos en un pedestal que no merecen) se jactan de tener cercana relación con Marko Cortés la realidad es que el único poblano que le habla al oído al líder nacional panista se llama Húmberto Aguilar Coronado, quien aborrece, por decir lo menos, al grupo que encabeza Huerta Villegas.
Tarde, pero Cortés Mendoza al fin descubrió que detrás de Huerta Villegas está el diputado federal Fernando Manzanilla, a quien ya le cerró las puertas del partido para evitar que ocurra un escenario similar a lo vivido la última década con Rafael Moreno Valle.
“El Tigre”, integrante de la Comisión Política junto con Genoveva Huerta, será el “dedo de oro” para definir las candidaturas a alcalde en los principales municipios de la entidad, la lista plurinominal del PAN y los perfiles que pelearán las diputaciones locales y federales de Puebla.
Además, el ex diputado federal tendrá el derecho de veto y no la lideresa estatal, quien tiene sus horas contadas al frente del partido de derecha.
Por Humberto Aguilar pasará el cómo, el quién y el cuándo.
Así como Genoveva Huerta ya trazóMrko su camino, los panistas de cepa en la aldea también tienen su ruta rumbo al 2021.
El primer paso será la designación de una delegación especial que suplirá al CDE del PAN para evitar que Francisco Fraile suba a la presidencia estatal ante la inminente revocación de “La Jefa Geno”. Después, vendrá la designación de Eduardo Rivera como el abanderado del PAN en la Angelópolis y luego la integración de la lista plurinominal del partido albiazul, en la cual, Ana Teresa Aranda, Aguilar Coronado, Rafael Micalco, Mónica Rodríguez Della Vecchia, Juan Carlos Mondragón, y otros panistas con pedigrí, llevarán mano en los primeros lugares.
Tras el proceso electoral del 2021, llegará el turno de renovar al partido y Mario Riestra, de acuerdo a diferentes fuentes consultadas, será el próximo líder estatal de Acción Nacional en Puebla.
La visión aldeana y la soberbia de Huerta Villegas la encaminaron a un acantilado del que no tiene escapatoria.
La obnubilada lideresa azul jamás entendió que eran tiempos de unidad y no de división.
Su ADN morenovallista le jugó en contra.
Hoy está claro que la disputa es entre el grupo de “La Jefa Geno” contra los panistas tradicionales.
No hay más.
La noche de los cuchillos largos en el panismo poblano ha iniciado.