Por Manuel Carmona*
Desde principios de octubre del año pasado a la fecha en mi columna Real Politik he venido publicando una serie de análisis que me llevan a sostener que en la carrera por la alcaldía en el municipio de Puebla, si bien es cierto hay muchísimos aspirantes en las filas de todos los partidos, con posibilidades reales sólo hay dos, y un detalle adicional es que los dos están en el PRI.
“Dóger o Agüera, no hay más” y “No se hagan bolas”, son las columnas en las que he expuesto con mayor detenimiento desde hace por lo menos cuatro meses los argumentos a considerar sobre el particular.
He abordado también en diversos momentos el asunto de los mitos, como el de los llamados “Cuatro Fantásticos” o el del amigo de Peña Nieto, el exitoso empresario poblano, Pepe Chedraui, ambos casos que no dejan de ser más que distractores sin relevancia alguna, alimentados por el periodismo ficción que tanto gusta y se practica en la aldea.
La semana pasada detallé las razones por las que el rector de la BUAP, Enrique Agüera, prácticamente tiene en charola de plata la candidatura del PRI a la alcaldía y además puse énfasis, también, en el mayor de sus impedimentos: Su ya proverbial indefinición.
Hoy escribiré por qué pienso que Dóger es el único obstáculo real que tiene Agüera en su camino, pero además es un obstáculo suficiente que, llegado el caso, sí puede arruinarle los planes y éstos son los puntos a considerar:
1.- Dóger está convencido de lo que quiere y tomó su decisión desde hace mucho, por lo tanto, en el plano personal se ha venido preparando física, mental y políticamente para obtener la candidatura a como dé lugar, al precio que sea necesario.
2.- Toda vez que con mucha anticipación decidió participar en el proceso electoral de 2013, su preparación se dio también en la construcción oportuna y consolidación de una estructura que se halla debidamente camuflada en el PRI municipal.
3.- Aunque no ha escuchado “las palabras mayores”, el propio presidente de la República conoce de viva voz sus aspiraciones y no le ha pedido que abdique a ellas, por lo tanto, sigue vigente como una posible opción, pero además de eso también tiene la puerta abierta con otras figuras de primer nivel en la política nacional con las que de manera constante cabildea en torno a sus aspiraciones.
4.- Se encuentra muy bien posicionado en todas las encuestas que se han levantado hasta el día de hoy, y aunque en las mediciones sale por debajo de Enrique Agüera, la diferencia es mínima, por lo que en caso de ser postulado por el PRI también le garantiza al partido la victoria electoral sin problema alguno.
5.- Aunque no es un orador en toda la extensión de la palabra, tiene muchos recursos para la esgrima verbal, sabe conducirse muy bien y hasta escabullirse en situaciones incómodas en eventos públicos y en encuentros ante los medios de comunicación.
6.- Dado que tiene 9 años fuera de la BUAP, ya está muy curtido en todas las vicisitudes de la política electoral y es todo un fajador a la hora del combate, en el cual es osado y nunca se arruga; por el contrario, se crece ante el castigo, de ahí que es un candidato que ni dibujado, está totalmente listo, entrenado, hecho a la medida para estos escenarios de alta competencia electoral y en este terreno sí le lleva amplia ventaja a Enrique Agüera, quien todos estos años sólo se ha conducido en escenarios controlados, propios de la vida política universitaria.
7.- Ex rector de la BUAP, ex presidente municipal, ex diputado local y hoy diputado federal, en este momento, Dóger, trae ya un cartel político sumamente respetable, muy por encima del aspirante que se les ocurra de cualquier otro partido, y en el PRI el único que le podría hacer sombra en este renglón, específicamente, sólo sería, Enrique Agüera.
8.- Como pocos, Dóger, practica como disciplina el estudio permanente de escenarios, sabe leer y además actuar casi en cualquier coyuntura política. Es frío y calculador, por eso tiene suficientemente claro que el próximo alcalde del municipio de Puebla participará en automático y además con ventaja en la sucesión a la gubernatura en 2018, de ahí que sabe la capital importancia que tiene hacerse de la candidatura y no escatimará recurso alguno para conseguirlo.
9.- De Dóger se pueden decir muchas cosas en su contra, pero hasta sus propios enemigos políticos admiten que tiene una profunda vocación de poder. Quiere y además sabe que puede y que ¡este es su mejor momento! También conoce perfectamente que en política el “timing” es fundamental, las acciones ni antes ni después, deben ser en su justo momento y cuando las acciones se dan de manera extemporánea pierden toda su efectividad.
10.- En el pasado ya le ha tocado dar pasos hacia atrás y también laterales como una cuestión estratégica y de supervivencia política, pero esta vez veo difícil disuadirlo para negociar, sabe que se acerca la hora de tomar la decisión más importante de su vida política, sabe que ha llegado la hora de echar el todo por el todo, que si hay necesidad, incluso, de romper tendrá que hacerlo, que es ahora o nunca.
* El autor es Consultor Asociado en la agencia HERA COMUNICACIONES asesores en marketing electoral www.fabricantesdedioses.com.mx