Adán Domínguez Sánchez, gerente del municipio de Puebla, informó que los trabajos de siembra de vegetación en las orejas peatonales generadas en varias esquinas de las calles del Centro Histórico concluirán en tres semanas.
En entrevista, Domínguez Sánchez afirmó que el plantar árboles o arbustos pequeños en estas nuevas zonas generará una reducción de calor y resguardo peatonal, para mejorar la calidad de vida de los ciudadanos.
Sostuvo que el Ayuntamiento de Puebla trabaja de la mano con las autoridades del Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH), las cuales instruyeron plantar arbustos pequeños en la zona de monumentos para no generar obstáculos a las casonas de los siglos XV y XVI.
El funcionario municipal dijo que cuidar este tipo de detalles generará un paisaje urbano pintoresco para los ciudadanos, turistas y visitantes que transitan por las calles del Centro Histórico de la ciudad.
En ese mismo sentido, aclaró que estás islas tendrán también la función de absorber el agua de lluvia para mejorar la temperatura ambiente en distintos puntos de la ciudad.
Cabe resaltar que son más de 20, las orejas existentes en algunas calles del Centro Histórico de la capital poblana en las que se sembrará plantas o árboles.
¿Qué son las orejas peatonales y cuál es su utilidad?*
Las orejas peatonales consisten en expandir el área que ocupan las esquinas de la banqueta para que el peatón pueda tener mayor seguridad al cruzar la calle.
Aunque en la mayoría de los casos estas forman parte de la acera, en algunos otros simplemente se encuentran indicadas con pintura, al igual que los cruces de cebra.
Ventajas de las orejas peatonales
1. Mayor espacio. Con las aceras más amplias, hay mayor espacio para que la gente espere al transporte público o para que aguarde su turno de cruzar la calle.
Este espacio también puede aprovecharse para colocar mobiliario urbano como paradas de autobús, buzones o bebederos, así como jardineras y plantas, sin bloquear el paso.
2. Reducen la velocidad de los autos. Las orejas peatonales reducen el carril, por lo que los coches deben ir más despacio. Además, el ángulo de las vueltas es más pronunciado, lo que causa que giren lentamente.
3. Reducen la distancia de cruce. Al crecer la banqueta y reducirse el carril, las personas deben caminar una distancia más corta para cruzar la calle. Junto con la menor aceleración de los coches, el riesgo se minimiza.
4. Delimitan el área para estacionarse y permiten ver mejor. Cuando los carros se estacionan en las esquinas, bloquean los pasos de cebra, la visión de los peatones que quieren atravesar y la de los conductores que tienen que dar la vuelta.
*Fuente: fiat.com.mx