El presidente de Ucrania, Volodímir Zelenski, ha anunciado este viernes que mantendrá una reunión “al más alto nivel” con su homólogo estadounidense, Donald Trump, “en un futuro próximo”, en el marco de los intensos esfuerzos diplomáticos para poner fin a la guerra con Rusia.
“No perdemos ni un solo día. Hemos acordado una reunión al más alto nivel con el presidente Trump en un futuro próximo. Mucho puede decidirse antes del Año Nuevo”, escribió Zelenski en sus redes sociales, tras una conversación telefónica con representantes del equipo de Trump, entre ellos el enviado especial Steve Witkoff y Jared Kushner, yerno del presidente estadounidense.
Fuentes diplomáticas y medios internacionales, como Axios y The Guardian, apuntan a que el encuentro podría celebrarse el próximo domingo 28 de diciembre en Mar-a-Lago, la residencia privada de Trump en Florida.
Zelenski confirmó posteriormente en una rueda de prensa que la reunión se centrará en temas clave como las garantías de seguridad para Ucrania, cuestiones territoriales, incluido el futuro del Donbás, y el control de la central nuclear de Zaporiyia.
El anuncio llega después de que Zelenski revelara esta semana los detalles de un borrador de plan de paz de 20 puntos, elaborado en colaboración con el equipo estadounidense, que estaría “casi listo” o “al 90%”, según fuentes ucranianas.
Entre los avances destacados figuran un posible congelamiento de las líneas del frente y la eliminación del requisito de que Ucrania renuncie formalmente a su aspiración de ingresar en la OTAN. Aunque no ha habido confirmación oficial inmediata desde la Casa Blanca, el propio Trump ha mencionado en entrevistas recientes su disposición a reunirse con líderes involucrados en el conflicto una vez que las negociaciones alcancen una fase decisiva.
Los contactos entre Kiev y Washington se han intensificado en las últimas semanas, con intercambios paralelos con Moscú a través de emisarios estadounidenses. Zelenski enfatizó que Ucrania mantiene una posición constructiva, pero insistió en que cualquier acuerdo territorial requeriría un referéndum nacional.
Este posible encuentro representa un paso significativo en la iniciativa de Trump para lograr un acuerdo de paz antes de fin de año, en un contexto de presión diplomática para detener el conflicto que ya cumple casi cuatro años.




