El Gobierno de la Ciudad, encabezado por el presidente Pepe Chedraui, a través del Organismo Operador de los Servicios de Limpia (OOSL) se unió a la campaña de la Secretaría de Medio Ambiente “Raíces del Futuro”, consolidando un esfuerzo conjunto para fortalecer la sostenibilidad y el cuidado del medio ambiente en la ciudad.
En el Relleno Sanitario de Chiltepeque se lleva a cabo un proceso de compostaje que utiliza materiales orgánicos provenientes de la Central de Abastos de Puebla, el Banco de Alimentos, así como hojarasca recolectada por la Dirección de Parques y Jardines del municipio y tierra vegetal. Bajo condiciones controladas de temperatura, humedad, pH y aireación, cada pila atraviesa las fases mesófila, termófila, mesófila II o enfriamiento y maduración, hasta obtener una composta de calidad lista para su uso.
La primera producción de composta, equivalente a 16.2 m³, fue utilizada en una jornada de reforestación dentro del marco de la campaña “Raíces del Futuro”. Se contó con la presencia de Omar Rodríguez, titular del Organismo Operador del Servicio de Limpia; Iván Herrera, secretario de Medio Ambiente; y el Ing. José Luis García Tehuitzil, Director de Operaciones de la empresa RESA.
El aprovechamiento de la composta en labores de reforestación refleja el objetivo de este proyecto: impulsar una economía circular, reducir la contaminación y transformar los desechos orgánicos en un recurso valioso que contribuya al bienestar ambiental de la ciudad.
SIEMBRAN 80 FRESNOS POR PARTE DE “RAÍCES DEL FUTURO
Por su parte, la Secretaría de Medio Ambiente realiza esta iniciativa como parte de una estrategia por la recuperación ambiental, ya que los árboles funcionan como barreras naturales contra la dispersión de contaminantes, mejoran la calidad del aire y ayudan a mitigar la emisión de gases de efecto invernadero.
El titular de la dependencia, Iván Herrera explicó la elección del sitio fue por su valor estratégico en la capital:
“Donde antes sólo veíamos un espacio gris, hoy construimos un pulmón verde. Los árboles no solo representan esperanza, sino que cumplen una función ambiental clave: filtrar el aire, regenerar el suelo y proteger a las comunidades cercanas”.