Angélica Luna Jiménez denunció la sustracción violenta de su hijo de un año y tres meses por parte de su expareja, Luis Enrique N., desde el pasado 15 de julio, sin que hasta ahora se conozca el paradero del menor. Aunque existía un convenio de custodia compartida, el niño no ha sido presentado ante la jueza ni se han activado mecanismos eficaces para su localización.
Acompañada por su abogada Montserrat González y diversas colectivas feministas, Angélica exigió la devolución inmediata del menor, así como la actuación urgente de las autoridades. Acusó a la Fiscalía General del Estado de Puebla de incurrir en violencia institucional, negándole medidas de protección y permitiendo omisiones graves en su caso.
La situación se agravó tras la detención de su anterior abogado, Raúl Andrade Osorio, acusado de lesiones y amenazas luego de un altercado con el agresor. Angélica denunció que esto la dejó sin defensa legal justo en un momento clave del proceso.
La abogada González advirtió que existe el riesgo de que el menor sea sacado del país, ya que el padre cuenta con el pasaporte del niño y posibles contactos en el extranjero. A pesar de ello, no se ha activado la Alerta Amber, y la Comisión de Búsqueda retiró el boletín tras una declaración informal del padre.
Angélica relató que ha sido víctima de violencia vicaria e institucional desde que denunció a su expareja por violencia familiar a inicios de año. Recalcó que el proceso legal está detenido por el periodo vacacional del Poder Judicial, y exigió medidas inmediatas para salvaguardar los derechos del menor.
Finalmente, pidió apoyo a la sociedad para difundir su caso, denunciando que teme por la integridad física y emocional de su hijo.