El Napoli se consagró campeón de la Serie A 2024-25 al vencer 2-0 al Cagliari en un duelo decisivo disputado en el estadio Diego Armando Maradona, logrando así su cuarto Scudetto en la historia del club y consolidando una temporada marcada por la épica y la resiliencia.
Los goles que definieron el campeonato fueron obra de Scott McTominay y Romelu Lukaku, quienes se convirtieron en los héroes napolitanos. El escocés abrió el marcador con una espectacular chilena al minuto 42, un tanto que quedará grabado en la memoria de los aficionados. Por su parte, Lukaku sentenció el título al minuto 52 con una definición potente tras un mano a mano que desató la locura en las gradas.
Este título cobra un valor especial por la difícil temporada que vivió el equipo dirigido por Antonio Conte, quien tomó las riendas tras una campaña previa desastrosa que dejó al club fuera de competencias europeas. Las lesiones, la baja de figuras como Osimhen y Kvaratskhelia, y la limitada plantilla no impidieron que el técnico italiano sacara lo mejor de sus hombres, combinando intensidad táctica y fe inquebrantable.
El estadio Diego Armando Maradona fue testigo del regreso de la gloria al sur de Italia, un hecho poco común en la Serie A, donde el poderío del norte domina históricamente. Esta victoria representa no sólo un logro deportivo, sino también una reivindicación social del sur italiano, siempre relegado frente a las ciudades más ricas del norte como Milán o Turín.
A pesar de que el Inter de Milán también ganó su partido de forma simultánea, el Napoli dependía de sí mismo y no falló. Con esta victoria, el club napolitano suma su cuarto título liguero, tras los obtenidos en 1987, 1990 (con Diego Maradona) y 2023.
Las calles de Nápoles estallaron en celebración con bengalas, cánticos y fuegos artificiales. Este 23 de mayo será recordado como otra fecha histórica para el club. El Napoli es campeón de Italia, y lo es con merecimiento absoluto.