El Crystal Palace conquistó el primer título de su historia, en Wembley, en la final de la FA Cup contra el Manchester City (1-0), gigante europeo que cierra la temporada sin títulos por primera vez desde el curso 2016-2017.
Un gol de Eberechi Eze (16) y un penal detenido por Dean Henderson ante Omar Marmoush (36) permitieron al club de la periferia de Londres conquistar la prestigiosa FA Cup, la más antigua competición de clubes del mundo, y disputar así la Europa League la próxima temporada.
El equipo rojo y azul, llevado en volandas por sus ardientes seguidores, arruinó la despedida del mago Kevin De Bruyne, figura del Manchester City desde hace una década.
El técnico del Palace, el austriaco Oliver Glasner, será para siempre el primer entrenador campeón con el club popular del sur de Londres, que había perdido dos veces en la final de la competición, en 1990 y 2016.
Los héroes de 2025 se llaman Eze y Henderson, pero también Marc Guéhi, el capitán, o Jean-Philippe Mateta, el delantero francés de 27 años, finalmente ganador de un primer trofeo él también, unos meses después de haber fallado en la final olímpica con Francia ante España.
Los ‘Eagles’ picaron en la primera oportunidad: un saque de meta corto, pequeños pases para atraer a su presa y luego un balón largo recibido por Mateta en la línea media. El delantero lanzó a la derecha al colombiano Daniel Muñoz, cuyo centro atrás fue aprovechado por Eze.
En Wembley, el ángel guardián del Crystal Palace fue Dean Henderson, el portero de manos firmes y nervios de acero.
Paró los pies a Erling Haaland y Josko Gvardiol, repelió un tiro de Jérémy Doku y, entre tanto, se lanzó a su lado derecho para detener un penal de Marmoush.
En la segunda mitad, el mismo escenario: el City atacó y el Palace resistió. Los regates de Doku eran infructuosos y la presencia de Haaland insuficiente en el área.
El City lo siguió intentando, pero se encontró un muro enfrente: Henderson se impuso también ante los revulsivos del City, el brasileño Vitor Reis y el argentino Claudio Echeverri, para culminar su obra maestra.