Aunque la contienda interna por la renovación de la dirigencia estatal del PAN se ha cerrado, generando preocupación en el grupo dominante, hay consejeros que se están redefiniendo y que ven con incertidumbre la alianza de Mario Riestra Piña y Genoveva Huerta Villegas.
En el plano de la percepción mediática esta alianza ha resultado benéfica para Mario Riestra, al lograr sumar como compañera de fórmula a la diputada Genoveva Huerta, cediéndole la Secretaría General y casi la mitad de las carteras del Comité Directivo Estatal (CDE), pero el terreno personal hay malestar porque de última hora se tomaron acuerdos al margen de los consejeros estatales de ambos.
En otras palabras, hay consejeros afines al excandidato a la presidencia municipal de Puebla que no simpatizan con la legisladora federal y consejeros de ésta que pintarán su raya con aquel y que muy difícilmente lo apoyarán con su voto en la sesión extraordinaria del Consejo Estatal del 15 de diciembre.
Primero porque Genoveva Huerta jamás les consultó sobre esta alianza y, en segundo lugar, porque ella misma les había adelantado que harían equipo con Felipe Velázquez Gutiérrez y el grupo del excandidato a la gubernatura, Eduardo Rivera Pérez.
Todavía el miércoles de la semana pasada, en presencia del diputado Armando Tejeda Cid, integrante del CEN del PAN, Genoveva Huerta se comprometió con Felipe Velázquez a hacer equipo, dándole el 40% de las posiciones.
Felipe Velázquez acordó con Genoveva Huerta que no sería la secretaria general, pero sí una mujer propuesta por ella de tiempo completo, y que este acuerdo lo ratificarían al día siguiente, ya con el nombre de la elegida. Sin embargo, la diputada federal ya nunca volvió a tomarle una llamada.
La razón se explica en la foto que el viernes por la tarde Mario Riestra subió a su cuenta de X, acompañado de Genoveva Huerta y el siguiente mensaje: ¡Juntos vamos por la renovación de la dirigencia!
Después de hablar personalmente con varios consejeros panistas, me parece que la moneda sigue en el aire, que Felipe Velázquez lleva la delantera pero por un estrecho margen de escasos 10 votos, que podrían ser menos o más dependiendo de su habilidad para sumar a los indecisos y convencer a los consejeros suyos y de Genoveva de la bondad de su alianza.
Para Felipe Velázquez el panorama también es incierto, pues por un lado necesita una compañera de fórmula que le sume votos, pero sin que le reste o inhiba los que hoy tiene del actual grupo dominante, que no se distingue precisamente por su apertura e inclusión.
En suma: la contienda en el PAN se encuentra en una fase decisiva, que ganará el que cometa menos errores y convenza a los panistas indecisos que a estas alturas no saben si optar por la continuidad sin continuismo o por el que ofrece un cambio de rumbo pero con aliados con un historial que tampoco es para presumir.
***
Correos electrónicos: [email protected] y [email protected]