Ni la rectora de la BUAP, Lilia Cedillo, ni el gobernador Sergio Salomón Céspedes estaban equivocados cuando aseguraron que los terrenos en donde se ubica CU2 sí son propiedad de esta institución, la cual adquirió las 110 hectáreas en el 2014.
Esto lo determinó un juez federal, exactamente un día antes de la inauguración de la primera parte de esta magna obra, quien determinó que el polígono que ocupa la máxima casa de estudios de nuestro estado, fueron adquiridos legalmente y que la familia Jiménez Bermúdez, la cual se ostenta como la legítima propietaria, no tiene ningún nexo consanguíneo con quienes en algún momento tuvieron posesión de estos terrenos, los cuales tampoco corresponden a la minuta presentada por quienes se decían propietarios y descendientes.
Vamos por partes, la familia Jiménez Bermúdez se ostentó como descendientes de una persona que en el año de 1934 tenía la posesión de alrededor de 330 hectáreas de terrenos en las juntas auxiliares San Pedro Zacachimalpa y San Baltazar Tetela, entre las que se decía se encontraban las 110 en donde se asentó CU2.
Mal asesorados, estos personajes reclamaban que estos terrenos les correspondían, por lo que iniciaron acciones legales en contra de la máxima casa de estudios en el estado, alegando ser descendientes de la legítima propietaria.
La BUAP y su rectora, Lilia Cedillo, iniciaron las acciones legales correspondientes para demostrar que los terrenos donde se asienta CU2 fueron adquiridos legalmente por la máxima casa de estudios en el estado.
Siempre por la vía legal, la BUAP demostró, uno: que los terrenos que alegaban eran propiedad de la familia Jiménez Bermúdez no corresponden al polígono de más de 300 hectáreas que reclamaban los supuestos descendientes de estos personajes.
Dos: que las más de 300 hectáreas habían sido vendidas a lo largo del tiempo, más de cinco veces, por diferentes personajes, un tema que es muy común en la zona, en donde abunda este tipo de prácticas, aprovechando que se trata de terrenos ejidales.
Tres: que los supuestos descendientes de la familia Jiménez Bermúdez no tienen ningún parentesco consanguíneo con quien se ostentaba, según, como legítima dueña de los terrenos, cuya minuta, reitero, data del año de 1934, es decir, de hace 90 años.
Luego de perder el amparo interpuesto ante las autoridades federales, la Fiscalía de Puebla inició un procedimiento en contra del abogado de los supuestos afectados, el cual está en marcha e incluye diferentes medidas que deberá de respetar este personaje.
Ya no hay nada que discutir y que nadie se deje engañar, los terrenos que ocupa CU2 son de legítima propiedad de la Benemérita Universidad Autónoma de Puebla.
Un dato adicional, la construcción de CU2 se llevó a cabo luego de obtener los permisos correspondientes, tanto del Gobierno del estado y, principalmente, del Ayuntamiento de Puebla, luego de presentar un proyecto de preservación y no agresión del humedal de Valsequillo, decretado en 2012 por el entonces gobernador, Rafael Moreno Valle, y el Gobierno federal, como área natural protegida, lo que impide que se lleve a cabo más construcciones en la zona.
Foto: Especial
Armenta y la Cámara de la Radio y Televisión
El gobernador electo de Puebla, Alejandro Armenta Mier, el pasado martes, sostuvo un encuentro con los integrantes de la industria de la radio y la televisión Puebla-Tlaxcala.
Cabe señalar que dicho encuentro tuvo lugar a instancias del presidente de la Cámara de dicho organismo, Antonio García, quien convocó a los empresarios de la región para tener un encuentro con quien será el nuevo mandatario de Puebla.
Reitero, la convocatoria y las invitaciones corrieron a cargo del presidente de dicho organismo, de nadie más.
Foto: Especial
La polémica
A expensas de que mañana abundaremos en el tema, es muy importante analizar lo que en breve el Congreso del estado aprobará en una de sus últimas sesiones de esta Legislatura y que tiene que ver con la equidad de género para la candidatura a la gubernatura, misma que solo llegará, según los diputados locales, hasta el 2036.
Ya nada me extraña de la bancada de mujeres en el Congreso local, las cuales no tienen nada de feministas, solo cuando afectan a sus intereses.
Es increíble que, con el afán de tratar de beneficiar proyectos políticos de hombres rumbo al 2030, quieran aprobar una ley en torno a esta materia.
El tema da mucho de qué hablar y ya lo hicieron los brillantes periodistas Alberto Rueda y Gerardo Ruiz.
Mañana le cuento.
