Más como un gesto de conciliación y no por el mérito de su trabajo en comunicación política, el morenovallista Marcelo García Almaguer fue incorporado al equipo de campaña de Alejandro Armenta Mier, el candidato de 4T al gobierno de Puebla. El gestor para que el exdirigente panista fuera tomado en cuenta fue Fernando Manzanilla Prieto, quien fuera tres veces titular de la cartera de Gobernación del Poder Ejecutivo Estatal.
Marcelo García Almaguer fue el responsable de la comunicación social en todos los proyectos político del extinto exgobernador Rafael Moreno Valle Rosas y como parte de esa participación, fue el autor de las campañas de “guerra sucia” en contra del movimiento obradorista en Puebla y en varias partes del país, cuando fue vocero del Comité Ejecutivo Nacional del PAN. Por eso resulta atípico que aparezca en el equipo de Armenta.
Aunque en realidad su presencia es de bajo perfil, por decir, poco relevante.
Una prueba de ello es que ayer Alejandro Armenta presentó ante la prensa a su equipo de campaña y simplemente no apareció el nombre ni la presencia de García Almaguer, quien es originario de Nuevo León y aparentemente ya se había desligado del estado de Puebla, pero ante la falta de oportunidades laborales se vio obligado a regresar a la entidad poblana.
Se sabe que después de que Morena eligió a Alejandro Armenta como su abanderado para luchar por el gobierno de Puebla, el aspirante morenista entendió que para fortalecer su proyecto político tenía que cohesionar a las diferentes corrientes internas de la 4T.
Una de las prioridades fue evitar que la estructura electoral de su primo y rival en la lucha por la nominación, Ignacio Mier Velazco, rompiera con Morena y se pasara del lado de la oposición, una posibilidad que sí estuvo presente entre los perdedores de la contienda morenista.
Por esa razón los principales operadores de Mier Velazco, de manera acertada, fueron incorporados a la estructura electoral de la 4T. Entre ellos destacan Fernando Manzanilla Prieto, Luis Antonio Godina Herrera y Francisco Ramos Montaño.
En el caso de Manzanilla, quien fue secretario de Gobierno en la gestión del panista Rafael Moreno Valle Rosas y en la administración interina de Guillermo Pacheco Pulido, así como secretario de Gobernación del mandatario morenista Luis Miguel Barbosa Huerta, aceptó pasarse del lado de Armenta, pero condicionó que también fuera admitido su equipo de trabajo.
Y en esa coyuntura, Manzanilla le pidió al candidato en tres ocasiones diferentes que también se incluyera a Marcelo García Almaguer, petición que, con cierta dificultad, aceptó el abanderado morenista.
Marcelo García Almaguer está presente en el equipo de campaña, pero arrinconado, lejos de los muchos agraviados que dejó el morenovallismo.
El político expanista está de regreso, pero sin el protagonismo y la arrogancia que le caracterizó en años anteriores.
Una verdad es que el morenovallismo fue una corriente política muy poderosa que, manejó un imponente aparato electoral.
El único responsable del crecimiento y evolución de esa corriente política fue Rafael Moreno Valle Rosas, un personaje obsesivo que personalmente cuidaba todos los detalles de las campañas electorales en que estaba involucrado.
La mayoría de los entonces colaboradores de Moreno Valle ganaron una fama y prestigio que se desplomaron cuando murió su líder, en diciembre de 2024, o se apartaron del grupo político del panista.
Es el caso de Fernando Manzanilla Prieto luego de dejar el gobierno de Rafael Moreno Valle Rosas no ha ganado una sola contienda electoral, pese a que muchos lo ven como un importante estratega político.
Y ahora Marcelo García Almaguer, ante falta de oportunidades laborales, tiene que trabajar al lado de la 4T, pese al odio que en años anteriores expresaba abiertamente hacia la izquierda. No le queda otra alternativa: “tiene que tragar pinole sin hacer gestos”.