Durante las campañas de 2018, un operador del PAN recibió en sus oficinas a un agente de la casa encuestadora Massive Caller.
Luego de escuchar su jerga técnica, típica de quienes venden Avón o Stanhome, el operador urgió al personaje —ataviado como mormón o chofer de ADO: camisa blanca de manga corta y corbata—: “¿Cuánto me vas a cobrar y qué me ofreces?”.
La respuesta fue breve y concisa: “Por un millón de pesos ponemos a tu candidata veinte puntos arriba en menos de seis meses”.
El plan era que creciera mes con mes, paulatinamente, para no generar suspicacias.
El operador le dio una patada en el trasero y lo echó a la calle.
Todo mundo sabe que Massive Caller es como una escort de Polanco: todo es pago por evento.
Y tienen un lema parecido al de la extinta Tintorería Francesa: “El cliente es primero”.
En otras palabras: el que paga, manda.
Llama la atención que en los últimos días varios personajes han movido en redes una encuesta en la que Alejandro Armenta aventaja a Eduardo Rivera por seis puntos.
Conociendo a Massive Caller y a Rivera, es claro que el cliente ya empezó a pedir cómo quiere el Brownie “loco y mágico” y con cuántos gramos de cannabis.
La duda mata:
Si de 2018 para acá la inflación acumulada en México fue de 28.75 por ciento, ya podemos imaginar el monto de lo cobrado.
No hay que buscar en la Principia Mathematica de Newton para saber que todo gravita.
Sobre todo los números de las encuestas.
Y más: que no sólo las manzanas caen por su propio peso.
Por cierto:
Mueve a la risa leer las líneas que tienen que ver con el supuesto trabajo que hace la encuestadora para conocer el pulso de la denominada opinión pública.
Vea el hipócrita lector:
“Desarrollamos un sistema robótico con el cual se pueden lanzar miles de llamadas, obteniendo las respuestas de la audiencia en el menor tiempo posible y eliminando el sesgo que implica el factor humano, lo que la convierten en la más confiable del mercado, con resultados más precisos”.
Ese sistema robótico sumado a los bots del candidato del PRIAN a la gubernatura de Puebla disipa toda duda.
Siempre es bueno saber de qué lado masca la iguana come Brownies mágicos.