La Fiscalía de Estados Unidos anunció que llamará a su último testigo contra Genaro García Luna, exsecretario de Seguridad Pública de 2006 a 2012, a principios de la próxima semana.
Esto anuncia un cambio en el calendario del juicio, por lo que los abogados defensores decidieron presentar una queja ante el juez, pues acusan que al principio del proceso se les dijo que el interrogatorio duraría seis semanas. Por lo que los abogados tendrán que decir en los próximos días si García Luna sube al estrado para declarar.
“Es una decisión de él”, aseguró César de Castro, líder de la defensa del acusado.
En un principio, la Fiscalía de Estados Unidos informó que tenía una lista con 70 testigos, pero para acortar el tiempo del proceso, se decidió reducir el número de testigos. Hasta el momento 25 personas han sido llamadas por la fiscalía. Al inicio del juicio, la defensa de García Luna informó que no llamarían a testigos propios, pero hasta el momento no han podido confirmar si García Luna declarará o no.
Aunque en este tipo de juicios es raro que el acusado suba al estrado, pues en caso de hacerlo, la fiscalía podría realizar un contrainterrogatorio, de esta manera, García Luna tendría que responder a las preguntas de los fiscales bajo juramento con el riesgo de ser acusado de perjurio por mentir si al final es declarado culpable.
César de Castro detalló que no puede compartir las conversaciones que ha tenido con su cliente sobre este tema pues rompería el contrato de confidencialidad. Al ser cuestionado sobre la decisión de la fiscalía de acelerar el juicio, el abogado se limitó a decir que “No sé, es la estrategia de ellos. ¿Sorpresa? No?”.
El día de ayer el juez encargado del caso, Brian Cogan, pidió a los fiscales que elaboren un nuevo calendario, por lo que de esta manera la fiscalía informó que esperaba terminar con los interrogatorios el próximo martes. El juez Cogan señaló que el jueves no habría audiencia porque como comparecerá un testigo importante y por logística se decidió suspender.
Audiencia del miércoles
La audiencia de este miércoles en contra de García Luna estuvo marcada por el testimonio de cuatro policías y de Iván Carrera de la Administración de Control de Drogas (DEA, por sus siglas en inglés), agente que detuvo a García Luna en El Paso, Texas, en diciembre de 2019.
Carrera detalló que cuando fue arrestado, García Luna negó tener nexos con el narcotráfico y con distintos cárteles de México, alegó que tampoco conocía Iván Reyes Arzate, excomandante de la Policía Federal condenado en 2022 por narcotráfico. Añadió que el acusado aseguró que mientras estuvo a cargo de la Secretaría de Seguridad Pública (SSP) nunca ayudó, ni protegió bandas criminales, por el contrario se dedicó a combatirlos.
Iván Carrera detalló que la declaración después del arresto no se grabó por problemas en el equipo de la DEA, aún así el exsecretario aceptó dar su testimonio, además de que brindó el acceso a sus dispositivos para que fueran revisados. También estuvo presente George Dietz, del Departamento de Justicia de Estados Unidos, quien además ha colaborado con los fiscales encargados del caso. En su comparecencia habló de una lujosa residencia que tenía el acusado, pero su testimonio quedó incompleto pues el juez Cogan analizará cuáles son las evidencias válidas en el proceso, la comparecencia continuará el lunes.
También estuvieron Marlene Tarantino, la funcionaria que revisó la solicitud migratoria de García Luna y Egbert Simpin, oficial que también participó involucrado en dicho proceso. Tarantino empezó su testimonio el día de ayer y el día de hoy concluyó su declaración. Ambos acudieron al juicio para testificar y narrar cómo fue el proceso migratorio del ex funcionario, pues se le acusa de dar declaraciones falsas cuando completaba el trámite, pues dijo que no había cometido ningún crimen.
El testimonio de Dietz continuará el próximo lunes. Después subirá al estrado el “testigo significativo”, el mismo por el cual el juez mandó suspender la sesión de mañana. La fiscal adjunta Saritha Komatireddy señaló que es probable que los interrogatorios de la fiscalía terminen el próximo lunes, con lo que esto cierra las posibilidades que llamen a más cooperantes a comparecer en el juicio, Todavía no se sabe quién será el último testigo.
A partir de este momento, los días que se prolongue el juicio dependerá de si García Luna quiere presentar su declaración, si este fuera el caso subiría al estrado el martes. Si no, tanto los fiscales como la defensa expondrán una declaración de cierre en la que detallarán por qué debe ser encarcelado el funcionario o por qué debe ser puesto en libertad. Después el juez Cogan les explicará a los jurados cómo realizar su veredicto, luego se dará la fase de deliberación en la que los 12 integrantes deberán decidir si es culpable García Luna.