La mayor parte de los medios de comunicación que dieron cuenta del encuentro entre el líder nacional del PAN, Marko Cortés, y el alcalde capitalino, Eduardo Rivera Pérez, centraron su atención en el hecho de que el cónclave era para confirmar que el poblano iba a ser el candidato a la gubernatura, cosa que sí necesitaban las bases del albiazul, las cuales no tenían certidumbre.
Pero si bien esta fue la parte central del encuentro y posterior tuit de Cortés con la frase que fuera lema del morenovallismo “lo mejor está por venir”, lo cierto es que el punto medular fue limar asperezas entre ambos y, sobre todo, llegar a acuerdos en beneficio mutuo y del albiazul.
Cabe recordar que Eduardo Rivera no era el candidato de Marko Cortés a la presidencia municipal en el 2021. El michoacano se dejó manipular por la entonces presidenta del Comité Estatal del albiazul, Genoveva Huerta Villegas, para impulsar a otros personajes, los cuales ni siquiera pintaban para darle la batalla a Morena y recuperar Puebla.
Para obtener la candidatura, Eduardo tuvo que someterse a una negociación y aceptar la imposición de Cortés y Huerta dentro de su Cabildo y también dentro de su administración, “cuotas” para la entonces presidenta y su grupo, un auténtico chantaje.
En esta ocasión, Eduardo Rivera buscaba que las cosas fueran diferentes para aceptar la postulación del Frente en Puebla y durante varios meses, trabajó, a través de su operador político, Abel Hernández, acuerdos con Cortés y su gente, para poder tener certidumbre y poderse ir a la campaña con acuerdos bajo el brazo.
Cabe señalar que, un personaje clave para poder subsanar las diferencias entre el alcalde capitalino y el CEN que encabeza Marko Cortés, ha sido el mencionado Abel Hernández, quien se reincorporó al equipo del edil y, sin duda, le ha comenzado a dar buenos resultados.
La irrupción de Xóchitl Gálvez en el panorama electoral y el aliento que le dio al Frente Amplio por México fueron, sin duda, claves para que el edil capitalino tomará la decisión de irse en búsqueda de la candidatura a la gubernatura de Puebla, arropado por el PAN, el PRI y el PRD.
Dentro de los acuerdos preliminares, Eduardo Rivera llevará mano en Puebla para la designación de los candidatos a puestos de elección popular dentro del PAN, para asegurar las mejores posiciones, para personajes que le puedan sumar a su campaña, algo fundamental para edil capitalino, pero también para su grupo político.
Por su parte, Cortés y la dirigencia nacional llevan mano en la designación de los diputados federales y para la fórmula al Senado de la República, posiciones que tendrán que negociar con sus aliados del PRI y del PRD.
También acordaron construir juntos en lo referente a lo que será más adelante, el cambio de la dirigencia nacional, en donde Marko Cortés quiere dejar como sucesor al actual coordinador de los diputados federales del PAN, Jorge Romero.
Para ambos personajes, Cortés y Rivera, estos acuerdos preliminares son muy significativos, porque son los primeros que se dan de manera directa entre ellos, con lo que al parecer se terminó ya la etapa de la desconfianza que prevaleció hasta antes de este encuentro.
El edil capitalino se prepara para dos eventos de suma relevancia, el Grito del 15 de septiembre al lado del gobernador Céspedes y su segundo informe de labores, en el cual se esperan anuncios muy importantes sobre el futuro.
Lilia Cedillo y la campaña “No te pases”
“No te pases” es el nombre de la campaña contra las adicciones que la rectora de la BUAP, Lilia Cedillo Ramírez, presentó ante directivos y tutores de unidades académicas, funcionarios universitarios, estudiantes y representantes de los medios de comunicación en Puebla.
Se trata de una estrategia que reúne esfuerzos para desarrollar entornos y ambientes sanos que salvaguarden la integridad física y emocional de los jóvenes.
Al hacer la presentación de esta campaña, la rectora de la BUAP sentenció, “esta campaña es una advertencia: si cruzamos la línea límite, será difícil el retorno”, al tiempo de subrayar que las adicciones son un problema de salud pública en México y el mundo; una problemática agravada en los últimos años.
Cedillo Ramírez señaló que en los últimos cinco años el consumo de drogas entre la población de 12 a 35 años de edad aumentó 5 por ciento en México. En el caso del tabaco, que contiene más de 30 sustancias carcinógenas, más de 5 millones de personas son adictas, y de alcohol, cuya ingesta inicia entre 13 y 14 años, 20 millones.
Por ello, dijo, “queremos generar conciencia entre la comunidad en torno al peligro que representan las adicciones. Lo primero será contener el tabaquismo y el alcoholismo, el primer paso que dan los jóvenes en el consumo de drogas más fuertes, un paso que no saben diferenciar”.
La rectora precisó que con la campaña “No te pases” la BUAP busca reducir el consumo de estupefacientes, pero también atender problemas de salud mental, erradicar la violencia de género y prever conductas suicidas, que colocan a los estudiantes en una situación de vulnerabilidad y atentan contra su vida.
La BUAP y su rectora siempre están cercanos a la sociedad y sus necesidades.
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