Una vez transcurrido el proceso electoral de este año, a Puebla se le presenta una oportunidad de “oro”, para aprovechar los próximos dos años y medios.
Desde el 2018, Puebla entró en una espiral de inestabilidad que afectó todas las actividades, debido al conflicto poselectoral que arrojó el proceso de ese año, en donde se enfrentaron Martha Erika Alonso y Miguel Barbosa.
Lo que siguió a la elección marcó mucho a la sociedad poblana, la cual quedó completamente polarizada, efecto que se mantuvo tras la muerte de la gobernadora en el accidente aéreo ocurrido el 24 de diciembre de ese fatídico año.
A la polarización se le sumó la incertidumbre, la cual paralizó la actividad económica de la entidad, fenómeno que no resolvió el interinato que encabezó Guillermo Pacheco Pulido, pero al menos freno la polarización de la sociedad.
La nueva elección extraordinaria celebrada en junio del 2019, nuevamente crispó el “mood social” del estado, aunque la victoria de Miguel Barbosa, apaciguo el ambiente que había prevalecido hasta el momento.
Pero cuando la administración estatal comenzaba a dar sus primeros, pasos de inmediato se hizo presente la pandemia, proveniente de China, la cual paralizó durante varios meses la economía de la entidad, lo que acrecentó la crisis que ya se venía sintiendo.
Trascurrido el proceso electoral y a la espera de que la pandemia ceda en su intensidad, se abre ahora si una oportunidad muy importante, para que los poblanos dejemos atrás las diferencias y comencemos a trabajar de manera sostenida, para recuperar todo lo que se perdió en tres años de luchas políticas y enfermedad.
Parece ser que ahora si existen todas las condiciones, para que en Puebla se dé un cambio con la llegada de las nuevas autoridades a nivel municipal, las cuales entrarán en funciones el próximo 15 de octubre y que, como cada tres años, representan una esperanza para cada una de sus comunidades, incluida la ciudad más importante en el estado, Puebla capital.
Es preciso que las nuevas autoridades, se pongan a trabajar de manera inmediata y de forma coordinada con el gobernador Barbosa, para hacer rendir más los pocos recursos a los cuales tenga acceso la entidad.
En este sentido, hay que señalar que el estado de Puebla ha sido especialmente castigado por la federación, en materia presupuestal, aunque ahora existe la esperanza de que, con la entrada de la nueva legislatura a san Lázaro, Puebla pueda acceder a mejores bolsas en el reparto del presupuesto para el 2022.
En este sentido, Puebla requiere que la nueva bancada de diputados federales 11 de Morena y 4 de Acción Nacional no sean agachones e indolentes como sus antecesores y busquen que la entidad sea retribuida de una mejor manera, para ayudar a la administración de Miguel Barbosa y a los poblanos, así como a sus respectivas comunidades.
En el plano local se requiere de una legislatura que al igual que la federal, no sea agachona, que apoye al gobernador, pero que responda a los intereses de los ciudadanos.
La elección del pasado 6 de junio dejo una gran lección, los ciudadanos ya aprendieron que su voto vale y cuenta y salieron a castigar a las malas administraciones y a los malos diputados, eso no lo deben de perder de vista, quienes ahora formarán parte del Congreso local.
Alejandro Carvajal, un personaje a seguir. No pierda de vista al diputado federal por Morena, Alejandro Carbajal, quien fue de los pocos que ganó la reelección del pasado 6 de junio, lo cual le vale una mención especial en esta columna.
Alejandro ya logró consolidar una base electoral, lo significa que puede aspirar a cosas más importantes y es Morena, Morena y la gente lo sabe.
Carvajal es un personaje humilde, que no gusta de presumir, pero es por demás efectivo y ya lo demostró, siendo de los pocos que logró la reelección en Puebla y más si se toma en cuenta que lo hizo en la capital.
Una de las cartas más fuertes de Morena para el 2021 es sin duda Alejandro Carvajal y sino, al tiempo.
La renovación de la dirigencia estatal del PAN ya es un hecho. Los diversos aspirantes a suceder a Genoveva Huerta en la dirigencia estatal del albiazul, ya se comenzaron a mover y es un hecho que habrá cambio de dirigencia.
Los ganadores de la contienda del pasado 6 de junio, ya comenzaron a sostener reuniones para ponerse de acuerdo y conformar un frente anti-Huerta, puesto que saben que esta mujer obedece a los designios de Fernando Manzanilla, pero que, además, si se mantiene en el cargo, entonces Acción Nacional está destinado a morir.
Twitter: @riva_leo
Ilustración: Alejandro Medina