Del 15 al 18 de noviembre, fecha en la que se realizará la novena edición del programa conocido como Buen Fin 2019, los negocios aumentan el riesgo de ser víctimas de delitos como son robo, extorsión y fraude; sin embargo, los usuarios también son más vulnerables ante acciones como sustracción y clonación de tarjetas, así como de información personal, según los registros de ALTO México, empresa que a través de la tecnología de la información aplica estrategias para la disminución de riesgo operacional y delitos.
De acuerdo con la Smart Data de ALTO México, las zonas en donde se han detectado aumentos relevantes en el reporte de delitos son: la Ciudad de México con 40%; Estado de México con 38%; Nuevo León con 8%; Puebla con 5% y Jalisco con 2%, en donde se hace un llamado a los negocios para redoblar la vigilancia a partir del próximo fin de semana y hasta el cierre de año.
Ante la llegada del Buen Fin, se ha detectado que, pese a que todos los productos en un establecimiento son vulnerables antes los delincuentes, los más buscados son:
Pantallas y celulares 170%
Drones 100%
Juguetes 85 %
Vino y cigarros 134%
Videojuegos 100%
Ropa 50%
FORMAS DE OPERAR
A lo largo de los 8 años de ALTO en México, se han logrado detectar algunos modus operandi más frecuentes por los ladrones solitarios y por las bandas organizadas, los cuales son:
Cambiar las etiquetas de precios, muy frecuente durante el Buen Fin.
Ocultar mercancía entre sus prendas de vestir.
Esconder los productos en bolsa o mochila.
Guardar los artículos en bolsas del establecimiento fingiendo una compra.
Usar arma de fuego.
Asaltos en estacionamientos.
Los reportes que se hacen ante ALTO y el seguimiento legal que se le da a cada uno, ha brindado información para detectar que durante este periodo de promociones y rebajas, la participación delictiva por género es de 38 por ciento de mujeres y 62 por ciento de hombres; en cuanto a promedio de edad, se detectó que en general el 57 por ciento de los implicados oscilan entre los 18 y 57 años, y en esta época, se registra un incremento en la participación de menores de edad, ya que el 35 por ciento de los implicados tienen menos de 18 años.