El impuesto con el que se pretende grabar las operaciones dentro del sector inmobiliario no debe aplicarse, ya que se corre el riesgo de disminuir las ventas de este tipo, consideró el vicepresidente nacional de la Asociación Mexicana de Profesionales Inmobiliarios (AMPI), Julio César Bonilla Yunes.
Con estas acciones se corre el peligro que el sector tenga una baja en las ventas y se inhiba la compra-venta, por lo que se tendrá que reconsiderar la acción.
“Es importante mencionar que de los 35.5 millones de viviendas en el país, el 5.3 por ciento no está ocupado y el objetivo es volverlas al mercado, pero con ello no será posible”, afirmó.